Si de algo ha servido la elección del nuevo presidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife es para dejar constancia de la división empresarial que hay en el organismo. Santiago Sesé, candidato oficial y empresario turístico de la Isla, ganó la votación por un voto de diferencia al otro candidato: Modesto Campos. 23 a 22 y un voto en blanco. El recién elegido presidente, que entra en la Cámara en sustitución de José Luis García, reivindicó su victoria y se mostró dispuesto a negociar, puesto que, a pesar de tener la Presidencia, no dispone del apoyo del órgano cameral que está dividido al 50%. Ya no se trata de integrar al sector perdedor, sino de estar obligado a entenderse con quien representa a la otra mitad del sector empresarial. Desde luego no le esperan buenos tiempos a Santiago Sesé. Asume una Presidencia llena de obstáculos. No sólo tiene que hacer frente al gigantesco déficit por el que pasa el organismo (más de 300.000 euros) sino que para cualquier asunto tendrá que convencer a la mitad del pleno. Una cosa ya tiene a su favor. Parece que las Cámaras podrán disponer de una ayuda, parte de ella procedente de fondos europeos, para hacer frente a los gastos. El Cabildo de Tenerife que está dispuesto a ayudar en este sentido a Sesé y poner la parte que le corresponde. Aun así, o mucho cambian las cosas o este organismo tiene los días contados. La decisión del Gobierno central de retirar las ayudas a las cámaras y que reciban el dinero por encomiendas las situó en una situación financiera muy complicada. Las Cámaras juegan un papel esencial para las pymes. Por eso ahora tienen que reinventarse y buscar el sitio que les corresponde en la sociedad y sobre todo en la opinión pública. Las Cámaras no deben ser un instrumento para unos pocos sino para todo el sector empresarial. Ya lo dijo Gustave Le Bon: “Progresar en una democracia real no es bajar la élite a nivel de la masa, sino elevar el nivel de la masa al de la élite”.
Amarga victoria
Si de algo ha servido la elección del nuevo presidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife es para dejar constancia de la división empresarial que hay en el organismo