El pequeño detalle de la firma

Ya tenemos la mejor de las disposiciones, una buena voluntad a prueba de mil declaraciones unilaterales de independencia, un borrador, el compromiso reiterado telefónicamente por 34.210 secretarios de Estado, la inmejorable química de los técnicos de allá y acá, otro borrador, sintonía para dar o regalar, los recados reconfortantes de dos, tres o cuatro subsecretarios, un tercer borrador, las garantías de los entornos, el acuerdo sellado tiempo atrás por los partidos y, por si quedara alguna duda, también tenemos lo que se dijo y plasmó en la agenda canaria; lo tenemos todo, únicamente falta, en boca del consejero de Obras Públicas o de los parlamentarios del PP, el pequeño detalle de la firma del cacareado convenio de carreteras. Solo eso; fíjate tú, qué bobería.

Falta la firmita, un fleco sin importancia. Solo la firma para que vea la luz un acuerdo que garantiza, según se anunció muy tridimensionalmente, una inversión de 2.500 millones de euros en un plazo de entre diez y quince años -semana arriba, semana abajo-. Ya pendientes de la anécdota de la firma, ya sabes, boli, garabato y café o cortado para celebrarlo, lo cierto es que se ha pasado de los 2.500 millones a esta letanía de adendas o prórrogas de las últimas semanas, días y noches. Con las administraciones discutiendo qué fue antes, si el huevo o la gallina, si el recorte estatal o la falta de proyectos, las obras siguen durmiendo sobre el palo del gallinero (si el Estado situó en los problemas presupuestarios de aquellos años la razón que justificaba su flagrante desinversión, ¿cómo es que en la península se están inaugurando ahora carreteras construidas durante esos mismos años de crisis?). Solo queda la firma, y la sospecha de que si finalmente se vincula a la aprobación de los PGE nos plantaremos en los meses de verano, así que a efectos prácticos (de obra nueva) en lo que a carreteras se refiere la legislatura autonómica se habrá perdido. Ya tenemos buenas palabras, intenciones, compromisos y disposición; al convenio solo le falta el detallito de la firma.