El Centro Municipal de Acogida de Santa Cruz para las personas sin hogar, se encuentra enclavado en el barrio de Azorín. Esto hace que la alta concentración de recursos, también suponga una alta demanda por parte de las personas sin hogar que, ante la falta de espacio, acaban pasando la noche en los alrededores del albergue. Actualmente son nueve, según reconoció el concejal de Atención Social, Óscar García, las que duermen bajo el voladizo del Pancho Camurria. El edil, en la comparecencia solicitada por el PSOE, explicó que, atendiendo a esta alta concentración de personas y recursos, se pondrá en marcha, en las próximas semanas, un “proyecto pionero” de intervención social para ofrecer alternativas de convivencia en el entorno del albergue.
En este entorno, que comprende las zonas bajas de Los Gladiolos, el mencionado barrio de Azorín y Somosierra, conviven a diario los usuarios del albergue con el vecindario común y es interés del área de Atención Social desplegar un conjunto de actividades que favorezcan la conciliación ciudadana. García valoró “esta nueva experiencia que nuevamente emprendemos desde el Ayuntamiento para favorecer la integración social, gracias a la cual un equipo de educadores sociales, debidamente identificados, desarrollarán actividades en los espacios públicos en colaboración con las asociaciones de vecinos y de entidades de carácter social”. La novedad de este proyecto, indicó García, es que “no hablamos de una relación exclusiva entre quienes ofrecemos servicios y quienes los demandan, sino que en esta ocasión apostamos por un modelo abierto, que involucre a los vecinos del barrio”.
Desde la oposición se reprochó a García que, tres años después de su llegada, la situación de las personas sin hogar no ha cambiado. Criticaron la baja implicación del resto de administraciones, y grupos como Sí se puede, exigieron que el alcalde, José Manuel Bermúdez, sea “tan contundente con este asunto como con Valleseco”.
Hemeroteca
Publicidad
Esquelas