Un gran libro para un gran empresario

Santiago Puig me ha enviado su libro, cariñosamente dedicado, sobre los orígenes de Playa de las Américas. Es un homenaje a los pioneros; a su padre, don Rafael, y a don Antonio Domínguez, que supieron ver con claridad el futuro. Debe ser emocionante crear una ciudad. Ellos le devolvieron la vida al sur, que también existe, como escribió Benedetti y cantó Serrat. También es el libro un homenaje a Santiago, que ha recogido todos los premios que existen, incluido el de Hijo Adoptivo de Adeje, su segunda patria, o quizá su primera patria. El volumen está editado en Litografía Romero por la Fundación DIARIO DE AVISOS y escrito –bien escrito- por Juan Carlos Mateu. Con Santiago Puig y con su esposa, Noelia Afonso, tengo una buenísima amistad desde hace muchos años, desde que ella era una niña y él acababa de llegar a Tenerife, en busca de sus sueños. Las fotografías son indicativas de que ahora hay riqueza donde antes no había nada. Muchos han luchado por el sur, pero pocos como Santiago Puig Serratusell, que se ha dejado el pellejo en una labor que no era fácil, ni mucho menos. Con Santiago basta un apretón de manos o una llamada telefónica para cerrar un trato. De esta gente queda poca, ya no nacen personas como él. Y este libro quedará para la historia, para su historia personal y para la historia de una comarca y de una isla. Santiago Puig ha sido fiel a la idea inicial y la ha multiplicado por muchos enteros. Quizá a la forma de Montaigne: “La verdadera libertad es la de poder conseguir cualquier cosa sobre uno mismo”. Y este hombre y su familia siempre han estado ahí, con el trabajo como bandera y la inteligencia como divisa. Este libro hace justicia a un hombre y a sus predecesores en la tarea.