política

Con la expectativa del cambio y el temor a un frenazo en lo económico

Unos 1,7 millones de canarios pueden hoy votar en un ‘superdomingo’ electoral donde Canarias se juega su futuro más inmediato con la expectativa de pasar página tras décadas de gobierno de CC
El Parlamento de Canarias prepara el hemiciclo para albergar a 70 diputados (10 más que el número actual) a partir del 26 de mayo. Sergio Méndez
El Parlamento de Canarias prepara el hemiciclo para albergar a 70 diputados (10 más que el número actual) a partir del 26 de mayo. Sergio Méndez
El Parlamento de Canarias prepara el hemiciclo para albergar a 70 diputados (10 más que el número actual) a partir del 26 de mayo. Sergio Méndez

Unos 1,7 millones de canarios podrán elegir hoy domingo 1.382 concejales de los 88 ayuntamientos isleños, 157 consejeros de los siete cabildos insulares, 70 diputados que conformarán el Parlamento de Canarias y 54 europarlamentarios. Es todo un superdomingo electoral marcado por dos circunstancias determinantes: la posibilidad real de un cambio político tras décadas de Gobiernos de Coalición Canaria en las principales instituciones regionales y tinerfeñas, y el temor a que la actual desaceleración económica se traduzca en una nueva recesión económica, justo en la única comunidad autónoma española, la canaria, que no ha recuperado la renta per cápita previa a la crisis iniciada en la segunda mitad del decenio anterior.

Tras la derrota del PSOE en las recientes elecciones autonómicas andaluzas, CC se ha convertido en el mejor reflejo que puede hallarse en toda España de la perpetuación de un partido en el poder, con lo que ello supone de posible caldo de cultivo para la corrupción y de deficiencias en la gestión. No en balde, el balance es el habitual en este tipo de casos, con unas Islas líderes en marginalidad y pobreza, cuyos ciudadanos esperan para ser intervenidos quirúrgicamente el doble de tiempo que la media estatal, mientras que una parte de sus dependientes fallecen sin recibir las ayudas que le son reconocidas,entre otros factores negativos.

Pero si algo alimenta la posibilidad de cambio en Canarias es el fracaso de la pretendida renovación generacional en CC, cuyo ejemplo incuestionable se refleja en el desempeño del actual presidente de Canarias, Fernando Clavijo, otrora llamado a ser la imagen de la nueva Coalición Canaria y hoy diluido en su condición de imputado en un escándalo de presunta corrupción como es el caso Grúas.

Clavijo, quien ya sobrevivió políticamente gracias a un defecto de forma en el sonrojante caso Corredor, hoy aspira a la reelección, lo cual es el síntoma de una clara anomalía de esta formación política a la hora de reinventarse como un proyecto político de futuro. Como no puede ser de otra manera, la alternativa solo la deciden los canarios, que ya indicaron la dirección en las recientes elecciones generales, donde el PSOE y Podemos fueron las fuerzas más votadas en las Islas. De producirse unos resultados similares, la posibilidad de un giro a la izquierda en las principales instituciones ahora controladas por CC, por el que abogan otras fuerzas como Nueva Canarias, Alternativa Sí se puede, IUC, Avante La Laguna, Nivaria o la propia Agrupación Socialista Gomera, es una posibilidad más que factible, pero no única, dada la previsible irrupción de Ciudadanos (cuyo código interno descarta acuerdos con imputados) o, incluso, el propio Partido Popular, cuyos dirigentes (especialmente en Tenerife) verían con buenos ojos entenderse con los socialistas en administraciones como el Gobierno de Canarias o el Cabildo de Tenerife. La Laguna, Santa Cruz y el Cabildo de Tenerife son los puntos calientes donde el mapa electoral de la Isla señala con una equis los posibles cambios.

Por mucho que se hable de ideología, es sabido que los tiempos políticos (y mucho más los resultados electorales) dependen en buena parte de la salud económica de turno, y en el horizonte cercano de Canarias aparecen nubarrones, o al menos eso considera la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) tinerfeña, cuyo Informe de coyuntura económica del tercer trimestre de 2018 ya advertía de que el crecimiento del PIB regional se ralentizará hasta el 1,2% por efecto del peor comportamiento del turismo y la caída del consumo; la organización empresarial no prevé creación neta de empleo el año próximo. Así de tajante.

Si, además, se produjera un brexit desordenado y sin acuerdo, se depreciaría la libra y se encarecerían los viajes al exterior de los turistas británicos, lo que impactaría de forma muy negativa en la economía de las Islas, habida cuenta de que la recuperación de turistas en Turquía y Egipto está lejos de haber concluido y continuará durante todo 2019. El resultado, por mucho que en CC se rechacen estas previsiones, es que no se espera que durante este año se cree empleo neto en Canarias en términos interanuales, todo una catástrofe en una comunidad autónoma que, también en este caso, ofrece de las mayores tasas de desempleo de todo el país tras tantos años de Gobiernos de Coalición Canaria.

Serán los retos que tengan que afrontar los que resulten elegidos hoy por los 1.618.782 canarios que podrán votar para las locales, 1.720.945 para las autonómicas y 1.760.742 para las europeas. Esto supone, según informa la Delegación de Gobierno, un aumento de 54.313 personas para las locales, 58.452 personas para las autonómicas y 90.549 para las europeas en relación con los últimos comicios. De esta manera, en Canarias las candidaturas que se presentan a las elecciones locales son 83 a los cabildos insulares y 580 a los ayuntamientos.

A las elecciones autonómicas aspiran 18 candidaturas a la circunscripción autonómica y 81 a la circunscripción insular. Y a las elecciones europeas optan 32 candidaturas.

Hoy los canarios deciden su futuro durante los próximos cuatro años. Veremos hasta qué punto los políticos respetan el mensaje que salga de las urnas.

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