Es tal el empuje del actual sector crítico de la Agrupación Herreña Independiente (AHI) que, apenas 48 horas después de iniciarse una recogida de firmas con vistas a la celebración de una asamblea extraordinaria, la actual presidenta del partido, Belén Allende, ha comunicado internamente a los dirigentes de dicha organización política la intención de presentar su dimisión irrevocable.
Como quiera que Allende se ha limitado, por ahora, a anunciar su renuncia al citado cargo a través de un mensaje enviado por WhatsApp a un chat oficial del partido, lo cierto es que todo apunta a que la que fuera presidenta insular hasta las recientes elecciones locales de mayo formalizará su dimisión por escrito el próximo lunes.
Será entonces cuando se produzca su relevo por el actual vicepresidente de AHI, el diputado autonómico (y consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias en funciones) Narvay Quintero.
Cuestionado al respecto, el secretario general del partido, Pablo Rodríguez Cejas (uno de los impulsores de la recogida de firmas junto a otros destacados dirigentes como Tomás Padrón, Javier Armas y el propio Quintero), se mostró cauto anoche en declaraciones a DIARIO DE AVISOS, y dijo que, “en principio, al no estar formalizada la dimisión de nuestra presidenta, nosotros vamos a seguir con el plan inicial de las firmas para llegar a esa asamblea extraordinaria”.
Eso sí, preguntado sobre qué sucederá cuando se produzca el próximo lunes, Rodríguez detalló que “entonces habrá llegado el momento de sentarnos, con Narvay Quintero como presidente en funciones, y en esa reunión se tomarán las decisiones que se consideren adecuadas para conseguir lo que más convenga a nuestro partido”.
Cabe recordar que en el germen de esta crisis interna de AHI se encuentra una asamblea (órgano de máximo poder en esta formación política) celebrada en 2016, donde la mayoría acordó desligar al partido de Coalición Canaria (CC), pero el Consejo Político (la dirección) nunca llegó a ejecutar el mandato de sus militantes.
Tres años después, AHI ha sufrido el mayor descalabro electoral en sus 40 años de historia, de tal modo que se ha quedado en la oposición tanto en los tres ayuntamientos de la Isla como en el propio Cabildo, reduciendo además su presencia en el Parlamento de Canarias al escaño logrado por Narvay Quintero.
Por eso no es de extrañar que el sector crítico de AHI reclame un retorno a las esencias del partido, que llegó a ser clave para la conformación de las mayorías regionales, un protagonismo que ahora tiene la Agrupación Socialista Gomera, que preside Casimiro Curbelo.
Lo cierto es que los nuevos vientos en AHI pasan por resucitar el papel del partido como referente inequívoco para la defensa de los intereses de los herreños y, en caso de que decidan romper sus lazos con CC, Narvay Quintero pasaría, inicialmente, a ser diputado no adscrito, pero podría beneficiarse de los cambios que, a buen seguro, tendrán lugar en el Reglamento de la Cámara regional para cumplir con uno de los requisitos de Curbelo: tener grupo parlamentario propio con solo tres diputados.
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