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Más de 200 personas reivindican unas pensiones dignas en Santa Cruz de Tenerife

La asociación tinerfeña, pionera en la lucha por las pensiones dignas, entregó un manifiesto en la Subdelegación que luego se leyó junto al Parlamento
La marcha salió desde la Plaza de Weylñer y acabó junto al Parlamento de Canarias./ Fran Pallero

Más de doscientas personas apoyaron ayer miércoles en Santa Cruz de Tenerife la protesta nacional en pos de lograr unas pensiones públicas dignas, gracias a la convocatoria de la Asociación para la Defensa de las Pensiones Públicas de Canarias, cuya rama tinerfeña, precisamente, es la pionera de este movimiento estatal.

La protesta de la capital tinerfeña, que se enmarca dentro de la celebrada a nivel de todo el Estado y que tuvo ayer su punto culminante con una manifestación de miles de activistas celebrada en Madrid, partió a mediodía desde la plaza de Weyler para dirigirse por la calle de Méndez Núñez hasta la Subdelegación del Gobierno de España, donde se produjo la entrega de un manifiesto con las reclamaciones consensuadas entre las distintas asociaciones que conforman la Coordinadora Estatal por la Defensa del Sistema Público de Pensiones. Finalmente, los ciudadanos que acudieron a la cita culminaron su protesta frente al Parlamento de Canarias, donde se produjo la lectura del referido manifiesto, que captó la atención de varios diputados que salieron de la Cámara regional a tal fin.

Sobre la protesta tinerfeña, Luis Serichol, uno de los fundadores de la plataforma isleña, mostró su alegría por el número de asistentes porque “no confiábamos en que viniera mucha gente estando toda la atención en Madrid y ser en la mañana de un día laboral; además, unos treinta de nuestros activistas están en Madrid”.

Entre las reclamaciones de estos activistas figuran “el blindaje de las pensiones en la Constitución como un derecho de todas y todos los trabajadores al fin de su vida laboral; que los jóvenes de hoy tengan la seguridad de que van a tener una pensión suficiente cuando les llegue el momento de la jubilación; que se establezcan medidas que eliminen la escandalosa brecha de género, que condena a las mujeres a pensiones un 37% inferiores a las de los hombres; que ninguna persona con pocos recursos pase frío en invierno por no poder pagar la calefacción; que ninguna pensión sea inferior al salario mínimo actual y en un próximo futuro salarios y pensiones mínimas se eleven hasta los 1.084 euros mensuales; que se deroguen las reformas de pensiones del año 2011 y 2013, que empobrecen a los actuales y futuros pensionistas; y que se deroguen igualmente las dos últimas reformas laborales”.

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