Ya son nueve los muertos que, al cierre de esta edición, han sido confirmados en el naufragio de una patera, que tuvo lugar durante la madrugada del pasado miércoles en la costa de Teguise (Lanzarote). Mientras, continúa la búsqueda de otras personas que viajaban en dicha embarcación y que, según los cuatro supervivientes, serían tres desaparecidos. Se trata de la mayor tragedia marítima sucedida en el Archipiélago canario desde 2009, cuando en esa misma parte del litoral conejero fallecieron 25 personas, víctimas como estas del naufragio de una embarcación procedente del continente africano, tal y como recordaba ayer DIARIO DE AVISOS.
Respecto a lo sucedido el pasado miércoles en Caleta de Caballo, a pesar de que la patera volcó a la una de la madrugada, no se supo del incidente hasta el amanecer, cuando un vecino encontró a los únicos cuatro supervivientes de los que se tiene noticia y dio aviso a la Policía Local. Estos eran todos varones de origen magrebí y presentaban buen estado de salud. Pero relataron que en la embarcación iban alrededor de quince personas, lo que activó un dispositivo de búsqueda en el que participan, desde ayer, Salvamento Marítimo, Guardia Civil, Grupo de Emergencias y Salvamento del Gobierno de Canarias y Bomberos, entre otros, como recuerda Efe. A lo largo del miércoles fueron recuperados del mar cinco cadáveres y ayer jueves fueron encontrados cuatro más, hasta llegar a un total de nueve fallecidos.
Las autoridades no están seguras de cuántas personas navegaban en la patera, pues se había hablado de un mínimo de 12 y un máximo de 16, aunque por el momento entre fallecidos y supervivientes se cuentan ya 13.
Cabe recordar que esta terrible tragedia tiene lugar apenas una semana después de que otras cuatro personas fallecieran y una más desapareciera cuando viajaban en un cayuco, que se quedó a la deriva durante quince días, hasta que fue localizado por un petrolero a unas 380 millas al sur de Gran Canaria.
Otra embarcación también se quedó a la deriva en estas semanas, pero felizmente Salvamento Marítimo pudo rescatarlos a tiempo cuando navegaban a unas 150 millas, también al sur de Gran Canaria, transportando a sus 151 pasajeros hasta el puerto de Los Cristianos.
En esta última quincena se ha reactivado la llamada ruta canaria (en tres días llegaron más de 250 personas a las Islas). El hecho de que solo esté en funcionamiento un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), el de Hoya Fría, ha provocado que se recupere el de Cruz Roja La montañeta (Garachico), para dar cobijo a los inmigrantes, así como la Casa del Mar en Las Palmas de Gran Canaria.
Además, el delegado del Gobierno en el Archipiélago, Juan Salvador, desveló en la mañana de ayer a Canarias Radio La Autonómica que al fin ha sido entregada la obra para reformar el CIE de Barranco Seco (Gran Canaria), por lo que cabe presumir que su reapertura se llevará a cabo en breve.
Salvador también defendió la efectividad del Servicio Integral de Vigilancia Exterior (SIVE), si bien reconoció que hay un radar en Teguise que aún sigue sin entrar en funcionamiento por motivos burocráticos. Al ser preguntado si esta tragedia hubiera podido evitarse en caso de estar activo dicho radar, Salvador respondió que “eso nunca lo sabremos, desagraciadamente”.
Torres: “Algo se hace mal cuando los que buscan una vida mejor la pierden”
El presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, mostró ayer su consternación por la muerte de, al menos, nueve inmigrantes en aguas de Lanzarote, después de que volcara, el pasado miércoles, la embarcación con la que intentaban alcanzar las costas canarias, óbitos que son “un drama”. Torres añadió que “algo se hace mal” en este mundo cuando personas que huían de sus países en busca de una “vida mejor, han perdido justamente la vida”. El presidente de Canarias hacía estas declaraciones en el transcurso del acto que se ha desarrollado en Caleta de Sebo, en La Graciosa, para recibir, por primera vez,al buque escuela de la Armada Juan Sebastián Elcano.
“Sentimientos encontrados de alegría por esa efeméride -la de la visita del buque a La Graciosa- pero también de consternación por los nueve inmigrantes fallecidos que, intentando tener una vida mejor, han perdido justamente la vida”.