
Diario de Avisos/AGENCIAS
La reunión de ayer en Madrid entre el PSOE y la delegación de Coalición Canaria y Nueva Canarias iba a ser un encuentro decisivo para saber la posición de los nacionalistas canarios ante la posibilidad de tener el primer Gobierno de coalición de izquierdas desde la II República. Pero CC y NC han decidido postergar sus negociaciones con el PSOE hasta que Esquerra Republicana de Catalunya decida su postura en la investidura de Sánchez. Eso, a pesar de que el PSOE ha mostrado su interés por cumplir con los compromisos de la llamada Agenda Canaria, cuestiones esenciales para la financiación, el autogobierno y los servicios públicos en Canarias. Pero los nacionalistas canarios prefieren no quemarse y ganar tiempo antes de tomar una decisión que podría causar tensiones en Coalición Canaria (CC), cuyos sectores más conservadores, fundamentalmente en la isla de Tenerife, rechazan apoyar a un Gobierno donde participe Podemos.
La delegación nacionalista la formaban el vicepresidente del Gobierno canario, Román Rodríguez, que estuvo ayer en Madrid en su condición de presidente de NC, y el secretario general de Coalición Canaria, José Miguel Barrágán. Ambos se reunieron con la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, y el portavoz adjunto de los socialistas en el Congreso, Rafael Simancas. Se trató de un encuentro “cordial” y de “trabajo” que, según explicaron los dos dirigentes nacionalistas, sirvió para saber cómo van las negociaciones para la investidura de Sánchez.
Tanto CC como NC explicaron que habían encontrado interés en el PSOE por continuar las conversaciones con ambas formaciones, pero que antes de comenzar cualquier tipo de negociación creen que es necesario concretar qué papel va a jugar ERC, que es, según Barragán, “la piedra angular” para saber si los demás pueden aportar algo o no al acuerdo” de PSOE y Unidas Podemos.
En este sentido, Barragán desveló que la ‘número dos’ del PSOE les había transmitido en esta primera cita que las conversaciones con Esquerra Republicana van “a buen ritmo” y que pueden concluir “en positivo”.
En la misma línea que Barragán, Rodríguez añadió que, si ERC contribuye finalmente a desbloquear la situación, él es partidario de entrar a hablar con el PSOE de los asuntos comunes para el conjunto del Estado, pero, sobre todo, de los que afectan a Canarias, entre los que ha citado el Régimen Económico y Fiscal, el nuevo Estatuto de Autonomía, la defensa de las singularidades de las islas en Europa y el cumplimiento de las leyes presupuestarias.
Ése sería el contenido de un hipotético acuerdo con el PSOE, pero antes, según insistió Rodríguez, debe darse una condición: que se desbloquee la situación política española, lo que depende de otras fuerzas, especialmente de ERC. “A partir de ahí es cuando entraremos a jugar un papel, no determinante, pero sí influyente, las fuerzas políticas” con menos peso parlamentario, apostilló.
Por ello, y porque antes deben trasladar las impresiones de esta reunión a sus respectivas Ejecutivas, ni CC ni NC desvelaron cuál será el sentido de su voto en una hipotética investidura de Sánchez, que, según Rodríguez, Lastra quisiera que se celebrara antes de la Navidad, “pero a lo mejor es después”.
En todo caso, el líder de NC, que fue socio electoral del PSOE en anteriores elecciones, recalcó que el partido de Sánchez sabe que los nacionalistas canarios están “dispuestos a apoyar la investidura y a contribuir a la estabilidad de un Gobierno a cambio de la defensa de los derechos e intereses” de Canarias. “Nadie nunca dará apoyo a ningún Gobierno si no es a cambio de que en ese Ejecutivo se vean reflejados los legítimos intereses y aspiraciones que podamos acordar”, concluyó.
Sin embargo, la postura de CC es más compleja y amenaza con romper la unidad de acción de la convergencia nacionalista canaria en el Congreso. Sectores de CC, fundamentalmente de de Tenerife, han mostrado su rechazo a apoyar un Gobierno en el que esté Unidas Podemos. De hecho, la organización consultará a los militantes en la isla para determinar la postura que defienden en el Consejo Nacional de CC, que es el encargado de tomar la decisión final. La portavoz de CC en el Congreso, Ana Oramas, que no estuvo ayer en la reunión, -como tampoco estuvo el diputado de NC, Pedro Quevedo-, ha mostrado también sus reticencias a apoyar a un Gobierno con Unidas Podemos que dependa de ERC. Mientras los catalanes de deciden, en CC evitan quemarse con el debate interno.