Un nuevo incendio en el abandonado edificio Iders alarmó en la tarde noche del martes a los vecinos del Puerto de la Cruz, si bien la rápida actuación de los bomberos del Consorcio Insular evitó males mayores, y más cuando está tan cercano el recuerdo de lo sucedido en dicho inmueble, cuando otro fuego causó heridas tan graves a un varón de 62 años de edad que falleció días después de ser ingresado en el Hospital para Grandes Quemados Virgen del Rocío, en Sevilla, a donde se le trasladó en un desesperado intento por evitar tan fatal desenlace.
Como entonces, las llamas se originaron en una de las habitaciones frecuentada por los okupas, concretamente en un par de colchones situados en una habitación de la cuarta planta, tal y como pudieron comprobar los bomberos después de que se procediera al desalojo del edificio, donde se encontraba una docena de personas en el momento del incendio.
Además de la evacuación de los presentes y de sofocar las llamas, se procedió igualmente a retirar material potencialmente inflamable de otras dependencias y a ventilar esta mole de diez alturas, que sigue en este lamentablemente estado de abandono desde hace varias décadas.
Hemeroteca
Publicidad
Esquelas