diario del aislamiento

Día 33

Amistades recuperadas, apuntaladas o descubiertas; cosas (buenas) de la cuarentena. Yo con el confinamiento me he reencontrado con las McVitie´s de chocolate, y de qué manera. Voy a por una -o dos-. Eslóganes de cautividad. Saldrá bien. Juntos lo haremos. Resistiré. Pomadas. Placebos. Paraguas para sobrellevar el chaparrón. Trucos emocionales que hemos consumido estas semanas, vale, bien; pero, ¿qué tal si empezamos a contar cómo estamos?, ¿y si comenzamos a verbalizar lo que realmente sentimos?. Carné de inmunidad. Los inmunes convertidos en aristocracia. Tiene riesgos, muchos. Una hipótesis. Habría quienes, viéndose con el agua al cuello, optarían por jugársela (bajen la guardia a sabiendas) para entrar cuanto antes en el club de los inmunes. La desesperación laboral -y económica- podría llevar a eso. Se equivocarán, entre otras cosas porque los casos de reinfectados plantean dudas sobre la inmunidad. Buceo, con gafas, aleta y tubo. Andrea Crisanti es profesor de parasitología molecular del Imperial College de Londres. Cree que el carné de inmunidad es una estupidez enorme. Crisanti defiende a ultranza los test masivos -está al frente del control epidemiológico de Véneto; su éxito lo avala-. Otra hipótesis. Las regiones más contagiadas serán las que menos contagien a corto o medio plazo, y viceversa -Canarias es viceversa, ojo-. Cómo debutar en la nueva normalidad que nos espera a pie de calle. Saldrán adelante las sociedades que aprendan a convivir con el virus, con otros brotes. Detectar. Aislar. Tratar. Identificar. Vivir. Sobre todo vivir; con respeto, pero sin miedo. El móvil se encargará de avisarnos si hemos estado con alguien contagiado: has estado en contacto, pide las pruebas, aíslate hasta conocer el resultado. Hago otro alto. Bendito café. Retornos. Me cuentan que envían este diario a familiares y amigos que lo leen en Nueva Delhi o México D.F. Qué cerca estamos quienes estamos lejos. Viviendo lo mismo. Haciéndonos idénticas preguntas. Otros 523 muertos en España. Imaginemos que cuatro aviones se estrellan a diario contra las Torres Gemelas, un día, y otro, y el siguiente. Hablemos con respeto (tacto) cuando aludimos a ligeros descensos o similares. Sabemos de Europa o América, pero seguimos sin saber de África. Pablo Iglesias admite que probablemente el Gobierno no ha hecho lo suficiente contra el virus -dijo probablemente, cuando debió decir lamentablemente-.

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