La Guardia Civil ha localizado en Tenerife a un hombre que se encontraba realizando pesca submarina en una zona prohibida para ello y sin la preceptiva licencia para el uso de armas, y que cuando fue identificado había capturado más de 8 kilogramos de pulpo.
El hombre fue identificado por agentes de la Guardia Civil pertenecientes al Grupo de Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS) tras recibir el aviso de un ciudadano, pues además de realizar pesca submarina en una zona prohibida para la citada práctica también incumplió las restricciones del estado de alarma.
En el momento de la identificación los agentes comprobaron, según indica una nota de la Guardia Civil, que carecía de licencia federativa para portar el arma que utilizaba, un fusil de pesca submarina, y que además había capturado cuatro pulpos con un peso conjunto de 8,33 kilogramos, mientras que para esta especialidad el máximo es de 5 kilogramos por persona y día o una única pieza de peso superior.
Por todo ello, los agentes del GEAS procedieron a la aprehensión del arma utilizada, así como de las capturas obtenidas de forma ilegal, que entregaron a una organización benéfica de San Miguel de Abona.
El pescador ha sido denunciado por cuatro supuestas infracciones, todas consideradas, a la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana, una por la carencia de la documentación requerida para la tenencia de armas y otra por desobediencia a la autoridad, al incumplir las ordenes establecidas por las autoridades competentes durante el estado de alarma.
Las otras dos infracciones son a la Ley de Pesca Marítima del Estado por el ejercicio de actividades de pesca en fondos prohibidos y por el incumplimiento de las normas sobre modalidades de pesca al realizar capturas por un peso superior al permitido, lo que puede ser sancionado con una multa comprendida entre los 601 y 60.000 euros.
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