La Laguna alcanza la mitad de la primera semana de la fase 1 del plan de desescalada con gran parte de los comercios y terrazas de la hostelería abiertos. Aunque hay incertidumbre y preocupación entre los empresarios, la idea generalizada es que no se puede seguir manteniendo el cierre y que es preferible abrir aunque sea con las restricciones establecidas por el Estado en esta fase 1.
“En general, lo que nos llega es que poco a poco la gran mayoría de los que podían han ido abriendo en esta fase. En las zonas peatonales es por supuesto donde más se han animado, pero en general a lo largo del municipio ha habido más o menos la misma cantidad de comercio abriendo”, indicó ayer la edil de Comercio, María José Roca, aunque no disponen de datos específicos de cada zona.
Roca apuntó también que han recibido muchas solicitudes para ampliar la terraza o instalar una, por lo que considera que va a ser una medida “bastante exitosa”. De hecho, el alcalde, Luis Yeray Gutiérrez, firmó ayer el bando que regula la autorización temporal de ocupación de dominio público, por parte de establecimientos comerciales, para la instalación o ampliación de terrazas al aire libre. Las autorizaciones de ocupación de la vía pública, que ya pueden solicitarse, serán gestionadas a través de la Gerencia de Urbanismo y no supondrán un incremento de las tasas municipales al tratarse de una medida excepcional.
El concejal de Ordenación del Territorio, Santiago Pérez, explicó que se trata “de una iniciativa que adopta el Ayuntamiento para apoyar el proceso de reactivación económica. Lo que intentamos es que mediante la ocupación de la vía pública se puedan compensar las actuales restricciones para la apertura, de manera que esta resulte viable para las empresas”. Santiago Pérez añadió que las medidas establecidas en el bando, que tienen un carácter meramente temporal, son de aplicación no solo en el conjunto histórico, sino en los diferentes núcleos poblacionales del municipio. Asimismo, expresó que con esta resolución “se ha buscado cuidar el equilibrio entre la actividad comercial y los derechos de los espacios reservados a los peatones”.
Mientras dure la necesidad del distanciamiento social, este nuevo edicto sustituirá a la ordenanza que regulariza la colocación de mesas y sillas, a excepción de los aspectos referentes a las dimensiones y condiciones estéticas del mobiliario en el ámbito del conjunto histórico.
A través de este documento, se autoriza el aumento de las terrazas en sentido longitudinal en aquellos espacios que dispongan de un frente a vías peatonales o a aceras con anchos mayores de 2,5 metros, así como en el caso de que los establecimientos cuenten en su frente con banda de calzada destinada a aparcamientos de vehículos.
Independientemente de si el negocio se encuentra en el primer o segundo grupo, todos los interesados en incrementar el espacio de sus terrazas deberán cumplir con una serie de obligaciones y acreditar que desarrollan la actividad con el título pertinente y en adecuadas condiciones de funcionamiento.
Entre los requisitos, destacan que en ningún caso se podrá ampliar el aforo que se fija en el título habilitante y que el mobiliario deberá colocarse a una distancia superior a 50 centímetros de línea de separación de la vía de rodadura para garantizar su protección respecto al paso de vehículos. La instalación de las mesas y sillas, además, no podrá implicar la ejecución de ninguna obra ni habilitarse en un espacio en el que se estén realizando trabajos de construcción en su entorno inmediato.
En las vías en las que finalmente se permita la ampliación de las terrazas en la banda de calzada destinada a aparcamientos, el Consistorio limitará la velocidad máximo de los automóviles, que por lo pronto no podrán sobrepasar los 20 kilómetros por hora, y realizará un análisis previo de la situación y la viabilidad de la ocupación en los casos en que se afecte a zonas de carga y de descarga y con contenedores.
Esta medida ha animado a abrir a muchos negocios que a lo mejor hace una semana no se lo planteaban.
Zonas comerciales
“Lo que han tenido terraza se han animado a abrir y han tenido buena acogida, yo creo que el 80% ha abierto. Lo único es que el aforo sigue siendo poco y las terrazas en el casco son pequeñas… Pero la gran mayoría ha pedido ampliar o están gestionando tener una nueva terraza”, afirmó Iván Pérez, presidente de la asociación Asiec – La Laguna Zona Comercial, quien añadió, en cuanto al comercio, que también “ha abierto la mayoría y ha habido afluencia, no tanto de consumo, la gente va ahora más a mirar”. Sus asociados se ubican mayoritariamente en el casco de la ciudad pero también en zonas como Taco y La Cuesta, donde apuntó que quizás “les ha ido más flojo”.
A este respecto, el presidente de la Asociación Empresarial de Taco, La Cuesta, Finca España y Los Majuelos (Asecu), Alejandro Conrado, añadió que “se está abriendo gradualmente” y que, hasta ahora, el comercio de la zona es el que más se ha animado. “Estamos contentos, el volumen va subiendo, seguramente se irán sumando más”, apuntó, a la vez que valoró el esfuerzo que están haciendo las pymes, muchas familiares. “Le estamos echando ganas, ilusión y estamos abriendo relativamente rápido para todas las circunstancias que hay”, enfatizó.
Un dato positivo es que en estos primeros días de la fase 1 la gente se ha animado bastante a consumir. “Sobre todo por la mañana, por la tarde no tanto porque estos días ha llovido en La Laguna, con lo que el dato no es muy fiable – apuntó Iván Pérez-, pero por la mañana han estado a tope, aunque sigue sin ser rentable”. Aún así, “es mejor ese poco que están facturando que nada”.
En cuanto a las ayudas en torno a los tres millones anunciadas por el Ayuntamiento para las pymes y autónomos afectados por la crisis del Covid-19, la concejal María José Roca indicó ayer que “ya está prácticamente finalizada la modificación presupuestaria y la semana que viene irá a Pleno para su aprobación”.
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