política

Arona y Santa Cruz, dos ‘fuegos’ controlados, al menos por el momento

Los movimientos políticos que podían arrebatar las alcaldías al PSOE en dos municipios de la Isla parecen ir perdiendo fuerza; la pandemia vuelve a ser la prioridad, lejos de las ambiciones de poder
Patricia Hernández, actual alcaldesa de Santa Cruz de Tenerife, y José Julián Mena, regidor de Arona. DA
Patricia Hernández, actual alcaldesa de Santa Cruz de Tenerife, y José Julián Mena, regidor de Arona. DA
Patricia Hernández, actual alcaldesa de Santa Cruz de Tenerife, y José Julián Mena, regidor de Arona. DA

El viento sopla y sopla, pero como en el cuento infantil, la casa no se desploma. Los dos ayuntamientos gobernados por el PSOE que podían ser objeto de sendos movimientos políticos para cambiar de manos o de caras visibles, el de Arona y el de Santa Cruz, parecen haber experimentado cambios en las últimas horas, logrando algo de estabilidad dentro de los márgenes que permite la excepcionalidad propia de una pandemia.

El improvisado salón de plenos sureño, habilitado en el Centro Cívico Cabo Blanco, contó con la presencia de empresarios como Agustín Marichal y Diego Cano, este último propietario del centro comercial Artslife & Shopping en la Punta de El Camisón, en Playa de las Américas, edificio que se encuentra paralizado y precintado al ocupar, presuntamente, la servidumbre de protección de dominio público marítimo-terrestre, y que ha sido uno de los factores -no el único- que ha llevado al alcalde, José Julián Mena, a destituir al concejal de Urbanismo.
La división de los dos bandos del PSOE se había puesto de manifiesto en una maratoniana reunión del grupo de Gobierno celebrada en la noche del martes, con Ángel Víctor Torres, secretario general del PSOE canario, y Pedro Martín, líder del partido en Tenerife, que fueron testigos del fuego cruzado entre el grupo de concejales socialistas que se oponía al cese de Luis García y el alcalde (y sus ediles leales), al que le exigieron cambios en su staff. Ambas partes acordaron volver a analizar la situación el próximo lunes en un encuentro al que está previsto que asistan, de nuevo, Torres y Martín.

Y, al parecer, dicha reunión surtió efecto. En la última sesión plenaria del Consistorio aronero, que tuvo lugar ayer, no hubo voto dividido de los ediles socialistas. Todo ello, a pesar del ambiente de crispación de las últimas semanas, los comentarios en los pasillos y la ausencia del ya mencionado Luis García, además del concejal responsable del área de Deportes, Sebastián Roque.

También el fuego de la capital comienza a apagarse poco a poco. Según informaciones a las que ha tenido acceso DIARIO DE AVISOS, Ciudadanos, que ya había manifestado su negativa a ser partícipe de ninguna acción que suponga “inestabilidad” en las instituciones tinerfeñas, dio ayer un toque de atención al PP en Génova en lo referente a la moción de censura que, presuntamente, sería rubricada hoy en notaría por populares y coalicioneros con el apoyo de Evelyn Alonso, que tomará posesión también hoy del acta de concejala en el Ayuntamiento.

En concreto, la formación naranja habría puesto sobre la mesa que cogobierna en otras administraciones con el PP, como es el caso de la Comunidad de Madrid, que ya ha sido objeto de críticas tanto por la gestión de la crisis sanitaria como las fricciones en el Gobierno, y que dichos pactos podrían peligrar en caso de hacer que una edil de Cs pase a ser una tránsfuga con tal de alzar a CC en el poder.

Es más, los líderes de Ciudadanos recordaron al PP, según las mismas fuentes, que su actual concejala, Matilde Zambudio, es la segunda de a bordo en la administración capitalina y cuenta con el apoyo del partido, una vez superados episodios que ya forman parte del pasado.

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