Agentes de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife arrestaron, ayer tarde, a un varón de 41 años por agredir a su expareja en el domicilio de la víctima ubicado en la zona de Ofra. El detenido, que acabó reconociendo los hechos, fue localizado por los policías escondido en el garaje del mismo edificio donde trató de ocultarse al ver llegar a los agentes.
Este servicio se inició cuando una patrulla de la Policía Local, que realizaba recorridos preventivos por la avenida Príncipes de España de Ofra, fue requerido por varias personas que alertaban de un posible caso de violencia de género en un lugar próximo. Los policías se desplazaron de inmediato a la vivienda donde se habían producido los hechos, encontrando a la víctima y a un hijo de la mujer, de unos siete años, en el interior del piso.
La mujer, de 43 años, presentaba evidencias de haber sido golpeada en el rostro y tenía los brazos llenos de sangre, aunque no se apreciaron, a simple vista, cortes o heridas similares. Una vez que llegó al lugar la dotación sanitaria, se entendió que debía ser trasladada al Hospital Universitario Nuestra señora de Candelaria (HUNSC) para evaluar los golpes que presentaba en la cabeza y la mandíbula.
Los policías constataron que en la vivienda había signos evidentes de haberse producido algún alboroto, al estar todo revuelto y detectar cristales rotos por el suelo, además de dos teléfonos móviles también dañados. Antes de ser trasladada, la mujer explicó lo acontecido y se colaboró en la localización de una persona allegada a la víctima para que se hiciera cargo del menor de edad.
Respecto al detenido, tras huir del piso se activó una búsqueda en la que participaron diversas unidades policiales que recorrieron las zonas cercanas al edificio. En estas labores los agentes también revisaron los espacios comunes del inmueble, dándose la circunstancia de que encontraron al presunto agresor escondido en el garaje tras una columna. Una vez arrestado, fue trasladado a las dependencias policiales, quedando a disposición de la autoridad judicial.