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Un pasajero borracho arranca la oreja de un mordisco a otro a su llegada a España desde Inglaterra

Hizo caso omiso a indicaciones de los tripulantes, intentando abrir el compartimento de las bebidas, llegando incluso a tomarse la consumición que le quitó a otro pasajero
Pasajeros de avión. Pixabay
Pasajeros de avión. Pixabay
Pasajeros de avión. Pixabay

La Guardia Civil ha detenido este jueves a un hombre de 29 años de edad por un delito de lesiones, al presuntamente agredir a otro en el interior de un avión que acababa de aterrizar en el aeropuerto de Palma, procedente de Inglaterra.

Según ha informado el Instituto Armado este domingo en una nota de prensa, el pasado jueves agentes de la Guardia Civil de Son Sant Joan fueron requeridos por la tripulación de una aeronave que procedía de Birmingham, debido al conflicto que originó un pasajero al que le negaron el servicio de bebidas alcohólicas durante el vuelo.

Este varón, que estaba en estado de embriaguez, hizo caso omiso a indicaciones de los tripulantes, intentando abrir el compartimento de las bebidas, llegando incluso a tomarse la consumición que le quitó a otro pasajero.

En ese momento, mientras los agentes recababan los datos sobre lo ocurrido en el vuelo en compañía del Sobrecargo en la escalerilla del avión, se percataron de una pelea que se estaba produciendo en el interior del aparato.

Inmediatamente después de percatarse, los agentes de Guardia Civil entraron y encontraron al joven agrediendo a otro pasajero, al que le había arrancado parcialmente la oreja derecha de un mordisco. Por este motivo, tuvo que ser reducido e inmovilizado por los guardias civiles para proceder a su detención.

La víctima, un compatriota del detenido, tuvo que ser trasladado a una clínica de Palma donde quedó ingresado por las heridas que presentaba, siendo atendidos los agentes en el mismo aeropuerto por lesiones leves.

Ante este tipo de situaciones, no muy frecuentes, interviene la Guardia Civil, al ser la responsable de toda la seguridad y el orden público en todas las instalaciones de la zona restringida de los aeropuertos, así como en el interior de las aeronaves tanto de llegada como de salida, levantando acta y procediendo en caso necesario a la detención del responsable, como ha ocurrido en esta ocasión.

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