
En su afán por desatar el nudo gordiano en que se ha convertido la negativa del Ministerio de Sanidad a que los test de antígenos sean válidos para que los turistas demuestren no traer consigo el coronavirus-19 a Canarias, el Ejecutivo que preside Ángel Víctor Torres se plantea si, como hizo Alejandro Magno, la solución pasa por sacar la espada y remover este obstáculo de forma expeditiva.
Si no se logra un acuerdo con Madrid (que sigue siendo la prioridad), la bala que se guarda en la recámara el Gobierno de Canarias es aprobar una norma autonómica que dé luz verde a dicho test de antígenos, para luego discutir si las competencias de la Comunidad sustentan la legalidad de una medida por cuya aprobación suspira todo el sector turístico de las Islas,
La clave radica en que este tipo de test es más barato y más accesible que las PCR, cuyo coste en algunos países se eleva hasta los 150 euros, el triple de lo que se paga en España. Cabe recordar que la ministra de Turismo, Reyes Maroto, propinó un chorro de agua bien fría al sector el pasado lunes cuando, con motivo de la cumbre celebrada en La Palma, sostuvo que Europa no estaba por los antígenos. La reacción de los hoteleros canarios no se ha hecho esperar, y han puesto el grito en el cielo al desconfiar de la veracidad de las palabras de Maroto y, sobre todo, entender que, sin antígenos, la temporada invernal está definitivamente perdida. “Es una excusa -dicen desde el sector-, es que nos mata definitivamente”.
Así las cosas, en el Gobierno regional se trabaja contra el reloj en busca de una solución. Se sabe que en el Ministerio de Sanidad hay división de opiniones, e incluso que la ministra no ve con malos ojos que se usen los antígenos, pero las negociaciones Canarias-Madrid continúan sin llegar a buen puerto aún.
Por eso, el Ejecutivo autonómico valora tomar una decisión propia en su Consejo de Gobierno previsto para mañana. Cabe recordar que Canarias cuenta ya con una norma autonómica por la que los viajeros deben aportar un test negativo en COVID-19 si desean dormir en cualquier tipo de alojamiento turístico del Archipiélago.
Sin duda, que Canarias apruebe por su cuenta que los test de antígenos sirvan para la llegada de los turistas sería, sin duda, una manera tan expeditiva como directa de cortar este nudo que estrangula hoy al turismo de las Islas.