Hay cambios que no se ven venir. Nadie podía pensar hace un año que el mundo entero estaría a merced de una pandemia sanitaria sin precedentes como la que nos está tocando vivir. Sin embargo, hay otros cambios más progresivos, menos bruscos, que van avanzando lentamente, pero que no por ello resultan menos nocivos y peligrosos, como el cambio climático. Un fenómeno del que hace una década muchos renegaban pero del que, a día de hoy, existen numerosas consecuencias ya demostradas en todo el mundo, incluida Canarias.
Cuando asumí la dirección de la Consejería de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial me propuse como prioridad elaborar, con el apoyo de todo el departamento, la primera normativa autonómica que aborde este gran reto con determinación, cuya puesta en marcha supondrá un cambio de modelo de desarrollo y conllevará obligaciones a todos los niveles, tanto a los sectores privados como públicos.
Hace algo más de un mes tuve la ocasión de presentar a los grupos con representación en el Parlamento de Canarias el anteproyecto de ley, para el que hemos contado con más de 250 aportaciones de asociaciones, entidades, empresas y demás agentes de la sociedad, y que será debatido en la Cámara en 2021 tras su aprobación por parte del Consejo de Gobierno.
Como no podía ser de otra manera, en él se destaca la necesidad de impulsar de manera decidida el desarrollo de un modelo energético más sostenible, una tarea en la que se debe involucrar toda la sociedad, aprovechando los instrumentos y ayudas públicas disponibles.
En la actualidad, el Gobierno de Canarias cuenta con diversas líneas para que instituciones, empresas y hogares canarios se apunten al proceso de descarbonización y a las que este año se ha destinado un presupuesto total de 8.045.000 euros, lo que supone un incremento del 52% con respecto a las ayudas concedidas en 2019 y demuestra la apuesta clara que este Gobierno de Canarias mantiene para consolidar un modelos energético sostenible, basando en energías limpias.
Solo en 2020, con cargo a estas ayudas, se van a impulsar 284 proyectos de eficiencia energética y uso de energías renovables por parte del sector privado, de los que 85 eran proyectos empresariales y 199 eran de uso residencial.
Un número que resulta bajo si lo comparamos con las más de 600 solicitudes presentadas a esta convocatoria, lo que demuestra la existencia de un interés creciente en la sociedad canaria por reformular o modificar el sistema energético actual.
Al mismo tiempo, el Gobierno de Canarias cuenta también de una línea para la concesión de préstamos por valor de hasta un millón de euros a aquellas pymes que necesitan financiación para adecuar sus equipos y procesos productivos a un modelo energético más sostenible. En la actualidad hay 4,8 millones de euros en el Fondo Canarias Financia, con el que las pequeñas y medianas empresas de las islas puedan financiar hasta un 85% de sus iniciativas de ahorro, eficiencia energética y autoconsumo renovable mediante la concesión de créditos en condiciones preferentes.
Ambos instrumentos están cofinanciados con fondos europeos Feder para la eficiencia energética y el uso de renovables, cuya cuantía aumentará en 2021. En concreto, tal y como se recoge en las cuentas de Transición Ecológica que presenté ante el Parlamento de Canarias, el año que viene se va incrementar en un 18,25% los fondos europeos destinados a financiar proyectos de eficiencia energética e instalación de renovables en instituciones, empresas y edificios de uso residencial.
Al mismo tiempo, y de cara a 2021, tenemos previsto impulsar una convocatoria de subvenciones para autoconsumo residencial, financiada con 1.250.000 euros de fondos propios de la Comunidad Autónoma de Canarias, con el fin de llegar a las familias canarias que quieren en sus domicilios aportar a este cambio en el modelo energético, apostando por las energías renovables.
Esto es solo el comienzo de un proceso imparable al que se deberá adherirse toda la sociedad. Hay que recordar que una parte de los fondos liberados por la Unión Europea (UE) para que los países miembros superemos la crisis derivada de la pandemia global se han orientado a la transición energética, lo que sin duda, nos permitirá acercarnos a nuestro objetivo de conseguir una Canarias descarbonizada en 2040.
* Consejero de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial del
Gobierno de Canarias