Vive en la calle Sabino Berthelot de Santa Cruz. Con la edad ha ido perdiendo visión y cada vez le cuesta más salir de casa. Conoce su entorno y eso le ayuda. Las fachadas de su calle le sirven para orientarse y caminar con seguridad. Sin embargo, desde hace unas semanas ha perdido sus referencias. Han colocado una terraza que invade casi toda la acera, y nada más salir del portal tropieza con las mesas. “Ya van dos veces que casi se cae encima de las personas que están en la terraza”, cuenta la presidenta del colectivo Queremos Movernos, Ana Mengíbar, que pone el ejemplo de este vecino para explicar cómo la proliferación de terrazas en Santa Cruz con motivo de las restricciones del COVID está afectando a las personas con discapacidad. Terrazas adosadas a las fachadas, aceras ocupadas en su totalidad, o con un espacio insuficiente para el paso de una silla de ruedas, son solo algunas de las infracciones que, a juicio de Queremos Movernos, se están cometiendo. Por ello, avanza su presidenta, “estamos valorando denunciar al Ayuntamiento de Santa Cruz por vulneración de derechos fundamentales, los de las personas con discapacidad, pero también por incumplir varias normas superiores como la propia ley de accesibilidad”. Mengíbar, que entiende que hay que ayudar a la hostelería, lamenta que para ello se vulneren los derechos de las personas con discapacidad. “Nosotros somos los más interesados en que haya terrazas porque es mucho más accesible para las sillas de ruedas o para las personas con alguna otra discapacidad. Pero lo que no puede ser es que se autoricen terrazas que no cumplen con la accesibilidad o que invadan el 100% de las aceras”, explica.
Queremos Movernos asegura que se sienten “abandonados” por el Ayuntamiento. “Llevamos quejándonos meses de esta situación, y no obtenemos respuesta. Las personas que vamos en silla de ruedas o con dificultades de visión nos sentimos los patitos feos en Santa Cruz”.
Desde la Concejalía de Accesibilidad, su responsable, Javier Rivero defiende que “las autorizaciones de terrazas en Santa Cruz se dan bajo criterios de accesibilidad. Los incumplimientos que me ha enviado el colectivo no están autorizados, y se ha acudido al lugar para que fueran retiradas”. Rivero añade que, ayer mismo, se ordenó la retirada de una de las terrazas que el colectivo denunció en sus redes por incumplir la autorización concedida.
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