Por nueve días

En el programa La reunión secreta, que se emite para todo el mundo y que dirige el doctor Gaona, dije que existía un informe científico que concluía que el volcán de Cumbre Vieja dejaría de emitir su terrible contenido a finales de noviembre. Me equivoqué por nueve días, ya que hace seis que la actividad cesó casi por completo y ahora, a decir de los científicos, la erupción puede darse por terminada. No descarto, por supuesto, alguna sorpresa, pero no parece probable. El informe estaba en poder de los vulcanólogos, pero ninguno se atrevía a darlo a conocer. Yo lo hice en el programa citado y además dije que el periodista no es un adivino, que se arriesga a ofrecer certezas en una erupción volcánica para equivocarse; dije claramente que hablaba semana arriba, semana abajo, como así ha ocurrido. El programa quiere repetir mis palabras, para que quede constancia de que acerté, pero el mérito no es mío, porque yo tengo nulas condiciones de augur, sino de los propios especialistas que han seguido el volcán y que me anticiparon su agónico final, con un porcentaje alto de probabilidades. Si acaso el mérito, si es que tengo alguno, estuvo en contar lo que otros no se atrevían. Y conste que los especialistas que han seguido la erupción están a punto de confirmar oficialmente su final, aunque quieren esperar unos días para vigilar determinadas emisiones de gases y dar el carpetazo al tema. El alcalde de El Paso, Sergio Rodríguez, y el presidente del Gobierno, Ángel Víctor Torres, también tenían noticias de esta conclusión, estando yo en La Palma durante la emisión del programa citado, en el mes de noviembre. Por cierto que mientras estuve allí se produjo un sismo profundo de 4,0, que yo no noté, y tampoco observé mala calidad del aire, ni elementos perturbadores que sugirieran otra cosa que una ralentización de la erupción. Salvo que se produzca alguna sorpresa, estamos en el final.