Derruir un inmueble que data del año 1922 y albergó la primera estación de teléfonos del municipio, para poder ampliar la carretera. Es lo que denuncian desde noincineraciónTenerife en relación a una casa tradicional de La Victoria de Acentejo en la que el Ayuntamiento ha puesto un cartel anunciando su intención.
“Al parecer, los trabajos ya han empezado y frente a unos pocos vecinos que no salen de su asombro y de su indignación está claro que para la inmensa mayoría, al menos eso parece, todo lo que sea meter el coche con comodidad es lo básico y primordial”, indican desde el citado medio.
El que tampoco sale de su asombro es el alcalde, Juan Antonio García Abreu, quien se cuestiona “por qué no dejan avanzar al municipio cuando todos saben que no está recogida en ningún catálogo y no es una casa canaria aunque pueda tener un formato canario del lado de la Carretera General pero no en la parte trasera, en la calle Tanque Ánimas, en la que ni siquiera puede pasar un camión de bomberos”. En este sentido, considera que “en pleno siglo XXI el municipio no se puede permitir este tipo de situaciones. Tenemos que seguir avanzando”.
“Defensor absoluto” del patrimonio
Abreu subraya que es “un defensor absoluto” del patrimonio local y de las casas canarias y prueba de ello es el Ayuntamiento trabaja junto con el Cabildo de Tenerife para rehabilitar la Casa del Deán Calzadilla, el entorno de toda la plaza y declarar Bien de Interés Cultural (BIC) a la Silla Victoriera.
El Consistorio adquirió este inmueble, de carácter privado y que ha sido “un escollo” en el entorno donde se ubica. “Todos los vecinos saben que el lugar era un estercolero y el objetivo es demolerla para poder crear aceras y que la gente circule de forma segura, que es el objetivo principal”, certifica el alcalde.
“Vamos a seguir adelante porque estamos convencidos de que estamos en lo correcto, no infringimos la ley y cumplimos con la voluntad del pueblo”, subraya el mandatario.
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