gastronomía

Churrería Tomás: el arte de convertirse en tradición

El establecimiento, ubicado en Taco, abrió sus puertas en 1960 de la mano del padre de Tomás, quien gestiona actualmente el negocio familiar junto a Yurena, su mujer
Churrería Tomás: el arte de convertirse en tradición. | DA

Los churros son una tradición española durante todo el año, pero cuando llegan estas fechas, en las que el frío comienza a hacerse notar y las mañanas se pasan en familia, los locales como la Churrería Tomás se llenan hasta la bandera. Churros y Navidad son casi sinónimos, y si a esa ecuación le sumamos el chocolate tenemos el resultado perfecto. En este local llevan desde los 60 desarrollando esta actividad familiar con una receta secreta única, que ha ido pasando de generación en generación y que es el motivo por el que cada día se acercan personas hasta el puesto para disfrutar de unos deliciosos churros y leer DIARIO DE AVISOS a través de la nueva app, que permite la lectura del periódico a través de un smartphone.

El tiempo ha ido pasando y la realidad es que los hijos que iban ilusionados acompañando a sus padres la mañana de reyes se han convertido en padres, siendo ellos los responsables de seguir con la tradición y acudir el día 1 o el 6 de enero a la Churrería Tomás para comprar sus cinco euros de churros para toda la familia.

Los regalos, el chocolate, el roscón y los churros han perdurado en el tiempo y la receta familiar de esta familia sigue triunfando entre pequeños y mayores. En este local no solo venden churros tradicionales, sino que además cuentan con argollitas y con una gran variedad de bebidas, entre las que encontramos cafés, refrescos y agua, que se pueden probar o bien in situ, o bien en casa, ya que los sábados, domingos y festivos cuentan con reparto a domicilio.

Aunque están esperando mejorar su servicio poniendo mesas junto al kiosko, la realidad es que los deliciosos churros y el exquisito trato de Tomás Díaz y Yurena Nieto, su mujer, son un reclamo suficiente para su clientela.

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