El Ministerio de Trabajo ha desvelado por fin el número de trabajadores con contrato fijo discontinuo que no trabajan, pero no figuran en las listas del paro. En una respuesta parlamentaria a la que ha tenido acceso El Mundo, Yolanda Díaz ha tenido que sacar del cajón uno de sus secretos mejor guardados desde que se aprobó la contrarreforma laboral. Nada menos que 443.078 trabajadores no están incorporados a las listas del desempleo, lo que supone un 15,6% más y que la cifra total de parados a finales del año pasado se acerque a los 3,3 millones de personas. La ministra lleva meses negando este dato, que, sin embargo, vienen reclamando economistas y servicios de estudios para obtener una fotografía más real del mercado laboral en España desde la reforma laboral de Díaz, para conocer en definitiva la cifra de paro efectivo. El interés de la ministra, no obstante, era otro y se pudo ver claramente el pasado 18 de febrero en una respuesta a una senadora del PP, cuando se aseguró que no tenían esta información. Ahora, ante el escándalo monumental de todos los meses al publicarse los datos, se ha decidido ofrecer una información elemental. Los fijos discontinuos, por su propia naturaleza, tienen varios periodos de trabajo y entre ellos estos trabajadores están mano sobre mano cobrando el subsidio de desempleo, aunque sin figurar como parados. El Ministerio de Trabajo no los incorporaba en las listas de desempleados que el SEPE hace públicas cada mes. Las razones esgrimidas para no hacerlo han sido variopintas. Desde que siempre ha habido este tipo de contratos y nunca se había exigido información, lo que viene siendo un “a usted que más le da” hasta que era muy difícil hacer un rastreo. Ahora queda claro que la razón era ocultar que en España hay casi medio millón más de parados de los que figuran en las listas oficiales. Hay que tener en cuenta que, a pesar de que este tipo de contrato ha existido siempre, sus cifras eran ridículas porque existían otras modalidades de contratación. Una vez que la reforma entró en vigor y desaparecieron, entre otros el contrato de obra y servicio, el uso del fijo discontinuo se ha multiplicado escandalosamente En tasa interanual, sólo entre enero de 2021 y enero de 2023, el aumento fue del 1.855% y del 558% desde la reforma en enero de 2022.