El candidato de Nueva Canarias-Bloque Canarista a presidente del Gobierno autonómico, Román Rodríguez, se mostró ayer convencido de que su partido logrará unos 100.000 votos, con entre 5 y 7 escaños, y será “decisivo” para lograr una mayoría “progresista”, que estaría “más cerca de los 40 que de los 36”. Rodríguez cree que NC superará los 83.000 votos y los cinco escaños conseguidos en las elecciones de 2019.
Durante la presentación en la sede de NC en Las Palmas de Gran Canaria del programa electoral, denominado Un plan de país para vivir y crecer mejor, el actual vicepresidente y consejero de Hacienda reseñó que en estos cuatro años ha habido “un Gobierno estable que ha defendido el interés general a pesar de los numerosos retos y dificultades a los que se ha enfrentado”. Uno de los elementos clave de esa propuesta es el autogobierno, “la defensa de la capacidad de decisión” para “articular el presente y el futuro de esta tierra y, de manera especial, y en esta misma categoría, la defensa de Canarias” en el contexto de la Unión Europea y de España. “No se entendería la Canarias de hoy y menos las Canarias del futuro sin un potente autogobierno y fuerzas políticas que defiendan nuestra singularidades, nuestros derechos, nuestros temas diferenciales que están consignados en los marcos constitucionales”.
Asimismo, NC preconiza “un modelo de desarrollo sostenible que tenga en cuenta la capacidad de carga del territorio, con especial atención a la lucha contra la crisis climática y respeto a la biodiversidad. Los servicios públicos y el Estado del bienestar en general son otras de sus prioridades: “Sanidad, educación, prestaciones sociales, cultura, vivienda y deporte”.
En lo que respecta al turismo, NC-BC propugna “un gran acuerdo” del sector centrado en “la calidad más que en el número de visitantes”. La lucha contra la pobreza, una fiscalidad “justa y progresiva”, el fomento del empleo, el transporte público y la “transformación” del sistema sanitario son aspectos que también recoge el documento.
Ese será el “principal” elemento que determinará la negociación de Nueva Canarias. El canarismo “transformador y comprometido” con el autogobierno exige, en palabras de Rodríguez, “exige el desarrollo y respeto del Estatuto, piedra angular para potenciar las relaciones bilaterales” con una Administración que, por ejemplo, “debe respetar la desvinculación de los recursos fiscales del Régimen Económico y Fiscal de la financiación autonómica”.
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