El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, se comprometió “a agilizar aún más” la información sobre el traslado de migrantes desde Canarias a la península, tras días de críticas de municipios y comunidades del PP por falta de coordinación.
Tras reunirse durante más de tres horas con alcaldes de los principales municipios y los consejeros de las Comunidades Autónomas para informar del dispositivo desplegado ante la crisis migratoria que afecta principalmente a Canarias, cómo funciona el dispositivo para atender la crisis migratoria y resolver las dudas que se plantearon al respecto, Escrivá señaló que la información “será más fluida”, pero “teniendo en cuenta que la situación se mueve con mucha rapidez y no siempre se pueden anticipar los traslados con muchos días”.
El ministro destacó “el buen funcionamiento del sistema, con una gran flexibilidad y capacidad de atención de personas” y señaló que actualmente España tiene abiertas 43.000 plazas entre la red de protección internacional y de atención humanitaria, “de las que sólo unas 5.000 se han abierto en las últimas semanas para atender el incremento de llegadas a costas, especialmente en Canarias”. Escrivá defendió que están “cumpliendo estrictamente” el compromiso con las administraciones canarias de que las islas no superarían el número de 6.000 personas acogidas.
Escrivá percibió que “hay un enorme desconocimiento” sobre cómo funciona el sistema de acogida y cómo opera. Recalcó que los desplazamientos a la Península “van acompañados de personas especializadas”. “Es un proceso como llevamos haciendo desde hace mucho tiempo que cumple unos protocolos estrictos”.
A petición de algunos de los participantes, se acordó convocar una conferencia sectorial, solicitada hace unos días por el PP, aunque su naturaleza es más apropiada para tratar cuestiones de política migratoria general y no la gestión de las emergencias.
La mayoría de las administraciones expresaron en la reunión su “solidaridad con Canarias y su voluntad de ayudar en esta situación”; la solicitud más habitual es pedir más información y que llegue de forma más ágil, saber cuánto tiempo puede durar la presencia de los migrantes en los distintos territorios y que se fijen más fórmulas de coordinación para que los servicios sociales puedan atender mejor, en caso necesario.
Durante la videoconferencia, Escrivá recordó que el sistema de acogida está preparado para gestionar situaciones de repunte de llegadas, como la ocurrida en el verano de 2021 a causa de la caída de Kabul (2.400 afganos llegados en 9 días) y a comienzos de 2023 a consecuencia de la guerra de Ucrania (84.000 personas recibidas en marzo y abril).
A su juicio, las 28.000 personas llegadas a las costas desde agosto “no son un reto mayor que los vividos en años anteriores” y “no va a tener impacto significativo sobre los sistemas educativo o sanitario, por el perfil de las personas llegadas en las últimas semanas.
El aumento de llegadas de las últimas semanas tiene características diferentes, como son el aumento de menores no acompañados, la concentración en El Hierro y de subsaharianos.
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