Las protestas salen de viaje: Madrid, Barcelona, Berlín, Londres… las demandas traspasan los límites de Canarias

Las protestas del 20 de abril contra el “crecimiento sin límites” de Canarias también salieron de viaje. Decenas de personas se concentraron en varios sitios para demandar un modelo turístico “sostenible y respetuoso con el medioambiente”.

Bajo el lema Canarias tiene un límite y con banderas, se desarrollaron actos en Madrid, Barcelona, Granada, Málaga, Palma, Berlín y Londres. ‘’Menos cemento y más fundamento’’, ‘’Vivo en un archipiélago donde gobiernan para el turista y la gente se muere’’ y ‘’Un turista gasta dos veces más agua que un residente. Nos visitan 16 millones al año. ¿Cuál es el límite?’’ eran algunas de las consignas.

En Palma, colectivos de la organización Menos turismo, más vida apoyaron las demandas y alertaron de que, al igual que Canarias, Baleares “tiene un límite”. En una nota de prensa, el GOB Mallorca informa de la movilización “histórica” en Canarias, precedida de una huelga de hambre colectiva e indefinida iniciada por activistas el 11 de abril. Todo ello, para urgir “políticas que prioricen el bienestar de la población y pongan fin a un modelo de turismo depredador”. Los ecologistas de Baleares han trasladado su apoyo a los activistas de Canarias que “están sacrificando su salud” para denunciar el modelo turístico actual que “ignora la realidad insular y los límites del territorio”, lo que ha llevado a que “Canarias se agota”. Al respecto, advierten de que el archipiélago del Mediterráneo coincide con Canarias en el “mismo modelo ecocida, racista y profundamente injusto” que “derrocha recursos que no se tienen y que es difícil conseguir, como el agua y la energía eléctrica”, lo que “obliga a disponer de infraestructuras desproporcionadas con relación en la población que, sin embargo, es quien carga con su coste”, causando “el empobrecimiento de la ciudadanía y de la misma comunidad”; así como “distorsiona y encarece el mercado de la vivienda y devasta el territorio, degradando los ecosistemas y el paisaje”. Añade que Baleares se enfrenta a “nuevas amenazas”, después de que “el Govern del PP haya decidido impulsar aún más el crecimiento turístico y la destrucción del territorio”. Censuran que el PP haya anunciando el levantamiento de la moratoria turística y la modificación de las leyes 3/2022, de medidas urgentes para la sostenibilidad y la circularidad del turismo de Baleares, y 3/2023, de Menorca Reserva de Biosfera. Y que defiendan el turismo de cruceros y se opongan a limitar su llegada, “a pesar de la contaminación, utilización de recursos (agua, residuos), saturación del centro de Palma y riesgo que supondrá el uso de la red eléctrica absorbiendo una energía que puede ser crítica para el sistema”. Critican, asimismo, que impulsen y apoyen inversiones para “engrandecer y optimizar infraestructuras al servicio de más crecimiento”, como el aeropuerto; así como que se prepare “una desregulación urbanística y territorial” que, en su opinión, “se traducirá en nuevas agresiones al territorio”. Por último, que “ignore las vidas colapsadas de quien sostiene este modelo”, con el “menosprecio” a las camareras de piso como ejemplo.

Los integrantes de la plataforma Menos turismo, más vida reiterar su solidaridad y agradecimiento a los activistas canarios por animarles a “seguir la lucha en defensa de la vida digna en los territorios hiperturistizados”.

En vísperas del 20A, los promotores de las manifestaciones aclararon que el objetivo era “tan importante y necesario que debería evitarse desviar la atención hacia cualquier otro aspecto que no esté directamente relacionado con poner límites al crecimiento”. Como “encontramos un rechazo firme por parte de algunos sectores, que abiertamente están teniendo el ánimo de tergiversar, emborronar y crear confusión sobre los motivos y el espíritu” de la convocatoria, expresaron que, ante todo, era “apartidista y sin absolutamente nada que ver con ninguna terminal política: “Ninguno de los colectivos y asociaciones convocantes nos hemos sentado a negociar nada con ningún partido de ninguna tendencia. No podemos evitar que estos asistan a la manifestación, aunque queremos dejar claro que consideramos el repentino apoyo, así como la asistencia de cualquier partido al 20A, una maniobra puramente oportunista. En segundo lugar, queremos dejar claro una vez más que la manifestación no es en contra del turismo. Estamos a favor del turismo, pero reivindicamos que es hora de ponerle límites. Por lo tanto, no nos cansaremos de decir que no se trata, de ninguna manera, de turismofobia. Si tenemos fobia a algo, es a la mala gestión del modelo y a la política turística de crecimiento continuo que se sigue en Canarias y que consideramos totalmente equivocada y fallida, dando como resultado la destrucción de nuestro territorio y la pérdida de biodiversidad actuales. El sentido que le hemos dado desde el principio a la convocatoria de esta manifestación es de total seriedad y preocupación por el presente y el futuro de Canarias, puesto que hemos tenido que llegar al punto de salir a la calle en masa para que se atiendan unas reivindicaciones que aportan soluciones imprescindibles a la supervivencia en las islas y que llevan demasiado tiempo sobre la mesa de diferentes gobiernos que no han trabajado por un futuro para Canarias. Por tanto, hacemos saber que no queremos que haya un ambiente festivo o musical durante la marcha, puesto que no tenemos nada que celebrar ni motivos para la alegría. Lo que tenemos es una sensación de engaño continuo y de hipocresía desde las administraciones hacia la ciudadanía en muchísimas materias que comprometen el futuro de nuestras islas, y de ahí nuestra sugerencia de manifestarnos en un tono serio y enérgico”. Estas son sus principales reivindicaciones: “Una moratoria turística y vacacional en Canarias que garantice que se dejen de crear inmediatamente nuevas plazas alojativas. No podemos seguir creciendo. Una regulación efectiva de la vivienda que garantice el acceso a este derecho básico a la población canaria, frenando el descontrol del alquiler vacacional y limitando la compra de vivienda a personas que no residen en las islas. El cobro de una ecotasa turística, es decir, que se cobre una pequeña cantidad de dinero a las personas que nos visitan para poder reinvertir lo recaudado en el cuidado y mantenimiento de los espacios naturales o en la creación de empleo verde. Todos estos puntos se engloban en lo que deben ser las bases de un cambio de modelo que Canarias necesita con extrema urgencia. Cualquier otra reivindicación de las arriba indicadas no emana de la organización de la manifestación, que se desmarca de cualquier tipo de consigna de tinte ideológico o político”.

En este contexto, 450 docentes e investigadores de diversas universidades y centros de estudios, tanto en Canarias como en el extranjero, llamaron a sumarse “masivamente” al 20A, al entender que este modelo, “regido por una economía centrada fundamentalmente en el turismo, se ha revelado poco ventajoso incluso para su población humana, sometida mayoritariamente a condiciones de vida precarias y cada vez más insalubres física y mentalmente”.

Desde el “máximo respeto”, la consejera autonómica de Turismo y Empleo, Jessica de León, recalca que “el cambio ha comenzado” y que es solo una parte del programa para modificar el bloque normativo de 1995: “Comprendo que la ciudadanía nos pida una adaptación”.