La hoja de ruta trazada por el Cabildo de Gran Canaria para el desarrollo de la industria audiovisual en la isla, por la que muchas empresas “hacen cola”, no se parará si los problemas entre socios hacen inviable la ciudad del cine prevista por Dreamland Studios SA en Telde, un proyecto que se tramita con normalidad.
Así lo ha asegurado este viernes el presidente de la corporación insular, Antonio Morales, al ser preguntado por las consecuencias de la querella interpuesta por dos socios iniciales de Dreamland Studios SA, las empresas Alquimia y Volcano Internacional, contra el accionista mayoritario, José Antonio Newport.
Estas dos empresas acusan a Newport de maniobrar a sus espaldas durante las gestiones para trasladar este proyecto de Fuerteventura a Gran Canaria para apropiarse de la idea y de comprometerlos a inversiones millonarias sin su permiso.
El Juzgado número 4 de Puerto del Rosario (Fuerteventura) ha admitido a trámite la querella y ha citado a declarar el 28 de mayo a José Antonio Newport y al representante que designe la sociedad Newport Media & Films, también querellada, por unos hechos que los denunciantes sostienen que pueden constituir delitos de administración desleal, apropiación indebida y delito societario.
Sobre la fuga de inversores para la ciudad del cine proyectada en el municipio grancanario de Telde que esta querella pueda ocasionar y sobre su potencial inviabilidad, Morales ha dicho este viernes a los periodistas, antes de participar en unas jornadas científicas con motivo del Día Internacional de la Enfermera, que “Gran Canaria tiene una hoja de ruta respecto del sector audiovisual, que está teniendo, además, un éxito extraordinario, con más de 120 producciones en 2023”, cifra que va camino de repetirse este 2024.
“Los platós que pusimos en marcha están a tope, el de última generación que inauguraremos en los próximos meses ya tiene una demanda extraordinaria, con colas para poder rodar en Gran Canaria. Estamos dando cursos de formación y seis empresas, las más importantes del mundo, trabajan en la isla en animación digital”, sector que da empleo a 300 personas, ha aseverado.
Morales ha garantizado que en esta línea se seguirá trabajando porque se ha ido creando un subsector relacionado con la producción y postproducción para pequeñas industrias que demandan rodajes.
Aunque ha admitido que es importante que Dreamland se asiente en Gran Canaria y contribuya a reforzar esta industria, ha afirmado que “no es la única posibilidad alternativa para seguir avanzando”.
“Ya veremos qué dicen los tribunales, esto, en principio, es un problema entre socios. Si el proyecto puede salir adelante, estupendo, bienvenido, pero si no puede hacerlo, pese a haber ido cumplimento con todos los procedimientos administrativos y ambientales que se le han ido requiriendo, nosotros seguiremos con nuestra hoja de ruta, eso no va a condicionar el desarrollo del audiovisual en Gran Canaria”, ha apostillado.