cultura

Mario Iglesias: “La inteligencia artificial no sustituirá a los cineastas y escritores”

El cineasta y escritor gallego, que ha publicado este año la novela 'El terapeuta y el algoritmo', ha sido distinguido con la Estrella Polar del Festivalito La Palma
El cineasta y escritor gallego Mario Iglesias. / Alba Pérez

Por Benjamín Reyes / Mario Iglesias (Pontevedra, 1962) ha recibido la Estrella Polar del Festivalito La Palma. Es uno de esos cineastas que se encuentran fuera de los circuitos comerciales, y en su cine aborda temas cotidianos como en Cartas italianas (2007), rodada en una semana en el marco del Festivalito, o Relatos (2009), que se exhibió en el Festival de San Sebastián. En la presente edición del Festivalito impartió una ponencia sobre el proceso creativo y presentó su flamante novela El terapeuta y el algoritmo, de 259 páginas, que se puede adquirir exclusivamente en Amazon, por 10,45 euros.     

-¿Qué valor le concede al premio del Festivalito?

“Es un reconocimiento de un festival con el que me une un gran componente afectivo. Aquí ya he hecho amigos en toda la extensión de la palabra. Es un honor y un privilegio compartir un premio que tienen Malena Alterio, Elsa López o Sergi López”.  

-¿A qué tipo de público está dirigido su cine?

“Creo que es bastante amplio. Por ejemplo, tengo una película titulada Relatos, que estuvo en la sección Made in Spain del Festival de San Sebastián o en el  Festival de Tokio (Japón). Es la historia de una señora de mediana edad que, de repente, se quiere dedicar a la escritura. Pues muchísimas mujeres, que estaban encorsetadas en su papel de amas de casa, se vieron reflejadas. La proyección en Tokio fue muy bien recibida, les tocó de cerca porque cuenta un drama contenido”.

-‘Cartas italianas’ (2007) se rodó en una semana en el Festivalito.

“Sí, es de las películas que he rodado que más me gustan. Se consiguió rodar en una semana porque todo el mundo se involucró y el Festivalito se volcó en su realización. Esta película, que es muy ensoñadora, le gustó a la gente del mundo del arte. El público de mis películas es muy abierto y va variando”.  

Concita la atención que los personajes de sus filmes sean personas cotidianas. ¿Son anti-héroes?

“Sí, son personas comunes y corrientes. Yo los llamaría más bien a-héroes. Igual que hay personas a-morales. Simplemente eso no va con ellos, están en otra dimensión de ganar o perder. En las historias cotidianas me produce un gran placer llegar a un giro que rompe la clave cotidiana. En De bares (2006) aparece un grupo de personas discutiendo sobre fútbol y acaban hablando de la distancia a la que está la línea del horizonte, desemboca en una discusión metafísica”.

“Un ser humano, cuando se enfrenta al hecho creativo, tiene intuiciones, deseos o miedos; todo eso no lo posee la inteligencia artificial”

-Su filmografía incluye más cortometrajes que largometrajes. ¿El formato corto es más libre para un creador?

“Seguramente. También he rodado largometrajes que incluyen historias cortas. Cambio de un formato a otro sin problema. Me gusta mucho la historia de historias. Por ejemplo, Relatos, es una historia de una mujer que escribe cuentos y vemos sus cuentos”.  

-¿De qué va El terapeuta y el algoritmo?

“Es un libro que parte de una obra audiovisual previa: una webserie titulada El origen del problema. El libro va de un terapeuta cuya vida se va complicando de una forma dramática, pero, como aparecen personajes estrafalarios, se puede ver como una comedia”.  

-¿Por qué ha elegido para la portada la imagen de un lobo trajeado sentado en medio de un bosque?

“Desde pequeño, para mí, el lobo representa el mal y el bosque representa el mal. Los cuentos que a mí me contaban provienen de la Edad Media, donde a los niños se los comían. La portada está en sinergia con el inicio del libro titulado Fábula de los lobos y el rey”.  

-¿La inteligencia artificial podría llegar a sustituir algún día a los escritores y cineastas?

“Creo que no, porque la inteligencia artificial es incapaz de crear un patrón. Solo es capaz de reproducirlo. La inteligencia artificial hace simulaciones, lo que hace es imitar. Un ser humano, cuando se enfrenta al hecho creativo, tiene intuiciones, deseos o miedos, y todo eso no lo tiene la inteligencia artificial. Existe una diferencia entre el pensamiento convergente y el pensamiento divergente. El primero recaba datos y patrones. El segundo está relacionado con el pensamiento artístico. René Magritte es el maestro del pensamiento divergente”.  

TE PUEDE INTERESAR