El pasajero que viajó el pasado mes de mayo desde Madrid a Lanzarote -donde reside-, sin conocer los resultados de su PCR, que finalmente fue positiva, ha sido sancionado con una multa de 1.500 euros, según publicaba anoche La voz de Lanzarote. El hombre cometió una infracción calificada de «muy grave» por la Subdelegación del Gobierno de Ciudad Real tras saltarse su aislamiento por ser contacto directo de un familiar fallecido por coronavirus.
Los hechos se remontan a finales de mayo, cuando el infractor había viajado al municipio de Manzanares, en la provincia de Ciudad Real (Castilla-La Mancha), tras ser informado de que su progenitora estaba en mal estado de salud por complicaciones de su enfermedad, falleciendo posteriormente el día 23 del mismo mes.
Tras morir la mujer, se detectó que era positivo en Covid-19, motivo por el que se aplicó el protocolo a todas las personas que tuvieron contacto directo con la fallecida y al realizar el test a su hijo, éste dio positivo en coronavirus, si bien el hombre se montó en el avión sin saber los resultados de estas pruebas.
Estos hechos provocaron que rápidamente se activara el plan de actuación para este tipo de casos, de tal forma que cuando el avión aterrizó en la Isla la Guardia Civil estaba esperando al varón. Asimismo, 14 personas se vieron obligadas a permanecer aisladas. Afortunadamente, todas dieron negativo en las pruebas.