En tan sólo cuestión de unas pocas horas, el paisaje urbano del precioso pueblo de Todoque ha vivido un cambio brutal. La lava ha sepultado edificios sin remordimientos y los vecinos asisten, atónitos y emocionados, a la destrucción de sus calles, sus plazas, sus lugares. Desde los más comunes a los más emblemáticos, como el restaurante Altamira, tótem de la gastronomía local.
Las terribles imágenes del antes y el después son escalofriantes. Un edificio erigido hace décadas que desaparece tras la llegada de la colada en cuestión de minutos. No es el único, también casas, como el edificio verde que puedes ver en el vídeo de arriba, se desploma en apenas unos segundos.