Cuantos más ojos mejor. Sobre todo, si tienen ganas de solucionar problemas. Y con esta intención ha convocado el alcalde de La Laguna, Luis Yeray Gutiérrez, la reunión que hoy se celebrará en el Ayuntamiento del municipio para tomar medidas frente al considerable aumento de casos de covid en las últimas semanas.
Al encuentro asistirán el director del Servicio Canario de Salud, Conrado Domínguez; el gerente de Atención Primaria de Tenerife, José Miguel Rodríguez; el director general de Seguridad y Emergencias, Gustavo de Armas; el director territorial de Educación de Tenerife, Federico Delgado; la gerente del Hospital Universitario de Canarias, Mercedes Cueto; y la rectora de la Universidad de La Laguna, Rosa Aguilar.
Según los últimos datos de la Consejería de Sanidad, la incidencia acumulada en los últimos catorce días es de 261 por cada 100.000 habitantes, frente a los 113 de Tenerife y los 74 del conjunto de Canarias. Un dato preocupante, pero que aún está lejos de la cifras de finales de agosto en Las Palmas de Gran Canaria y Arrecife, con 422 y 444 casos por cada 100.000 habitantes respectivamente.
Es difícil dar una explicación única para este repunte de contagios, pero la mayoría de los casos se concentran en las zonas del casco, San Benito y Finca España. Y las edades más afectadas son las franjas de entre 20 y 29 años y entre 30-39 años. Según fuentes consultadas por el periódico, muchos contagios están vinculados a reuniones familiares y al ocio juvenil en pisos de gente joven.
Para mejorar la situación en la calle, se está contemplando aumentar la restricción en los horarios de los bares en determinadas zonas, así como limitar la circulación en una sola dirección en algunas de las calles peatonales del centro de La Laguna. Unas de bajada y otras de subida. Pero luego hay otra serie de medidas, como el toque de queda -para evitar salidas nocturnas- o el cierre perimetral, que no son competencia municipal y solo puede tomarlas la Comunidad Autónoma, que tiene la competencia por delegación del Gobierno central tras la declaración del estado de alarma.
Lo que sí puede hacer el Ayuntamiento es practicar inspecciones, como están haciendo la policía local, Urbanismo y Sanidad. Más de 70 este último sábado. En estos casos, se trata de comprobar si los aforos de las terrazas y los interiores son los adecuados, si hay suficiente separación entre mesas, si la limpieza es la necesaria, si hay hidrogel, si los clientes mantienen la mascarilla hasta que van a consumir, etc.
La policía también puede poner sanciones si encuentra una fiesta de ámbito privado. El problema es que son difíciles de localizar, a no ser que exista una legión de chivatos que actúen como la STASI, la policía secreta de la República Democrática Alemana. Lo más funcional, por tanto, es que cada uno actúe bien, se ponga la mascarilla y evite las reuniones numerosas.