Después de conseguir fotografiar el año pasado en Sri Lanka a la la gran ballena azul, el animal más grande que haya existido jamás y publicar esas fotos en National Geographic, el fotógrafo de Granadilla de Abona, Juanmi Alemany, se marcha la próxima semana (jueves día 18) a la República Dominicana para embarcarse durante diez dias a la búsqueda de las grandes ballenas jorobadas e intentar fotografiarlas.
Juanmi Alemany recuerda que en su última gran inmersión en Sri Lanka perdió parte de su equipo fotográfico y espera “que no me vuelva a pasar”, estando estos días muy pendiente de la información metereológica, porque “no es normal que en Florida, por ejemplo, estén ahora mismo a cuatro o cinco grados”, lo que podría suponer que las aguas del Caribe no estarían demasiados cálidas, que es lo que buscan las ballenas para reproducirse.
La yubarta (Megaptera novaeangliae), también llamada ballena jorobada, es uno de los rorcuales más grandes, los adultos tienen una longitud de 12 a 16 metros y un peso aproximado de 36.000 kilos. Es la más acrobática y activa de las ballenas, capaces de sacar su cuerpo por completo del agua al saltar.
Uno de los comportamientos más interesantes de las ballenas jorobadas es su canto. Los científicos han descubierto que las ballenas jorobadas reproducen largas y complejas canciones que difieren entre las distintas poblaciones distribuidas por los océanos.
El Banco de la Plata es un santuario de protección de animales mamíferos en el Océano Atlántico, perteneciente a la República Dominicana, con una superficie de más de 19.000 millas cuadradas. Tiene una profundidad promedio de 20 metros, aunque puede alcanzar los 1.800 metros de profundidad.
Se estima que un promedio de 2.000 a 3.000 ballenasjorobadas visitan esta área entre noviembre y abril viajando hasta 25.000 km anuales.Las ballenas jorobadas llegan a esta área para reproducirse y cuidar de sus crías durante la época invernal que afecta el Atlántico Norte. Allí encuentran seguridad y protección para sus crías hasta que los jóvenes sean lo suficientemente fuertes como para hacer el viaje de regreso a la costa noreste de los Estados Unidos.