Tranquilidad absoluta y una organización exquisita, hasta el punto de que muchos residentes de la urbanización Villa Paraíso, en Santa Úrsula, no se percataron que en la calle del mismo nombre era uno de los escenarios de Rambo V, la superproducción protagonizada por Sylvester Stallone.
Pasaban en sus coches o caminando, pese a la lluvia, mirando el despliegue ocasionado en el lugar, apreciable solo en los momentos en que el equipo salía a comer. Razones tenían, ya que el tráfico no fue cortado en ningún momento, la calle estaba abierta al paso de vehículos, y el rodaje era en el interior de la vivienda denominada Villa Circense. No obstante, el dispositivo era enorme, conformado por las 200 personas involucradas en el rodaje, 1.000 figurantes y más de una decena de camiones pertenecientes a la producción.
Los preparativos comenzaron desde temprano, a las seis de la mañana, y fueron casi imperceptibles para los vecinos en general y para los habitantes de la exclusiva urbanización donde se ubica la casa del villano de la película, Hugo Martínez, encarnado por el actor español Sergio Peris-Mencheta.
Se trata de un lujoso inmueble para el alquiler vacacional, propiedad de una señora alemana, con piscina y playa en el jardín e impresionantes vistas al Valle y al Atlántico que cautivaron a todos los miembros del equipo, que sacaban fotos con sus teléfonos móviles. Según comentaron a este periódico algunos figurantes, su alquiler asciende a 1.200 euros diarios.
Antes de alquilarla, la productora contempló otras alternativas en diferentes localizaciones: Puerto de la Cruz, La Orotava, El Sauzal y La Laguna, también albergaban posibilidades de contar con una vivienda que cumpliera con las condiciones requeridas para la cinta de acción, dirigida por Adrian Grunberg y con guión del propio Stallone y de Matt Cirulnick.
Este periódico pudo saber que parte de los muebles que se utilizaron fueron adquiridos el día anterior por la producción en un establecimiento del polígono industrial San Jerónimo, en el municipio de La Orotava.
Poco antes de las doce del mediodía, las 200 personas involucradas en el rodaje más los mil figurantes hicieron un descanso para almorzar. El catering, encargado a la empresa Gomeralia, con experiencia en suministrar en este tipo de eventos, estaba preparado en la vivienda anexa, también de grandes dimensiones. Justo enfrente, en una pequeña carpa se podía degustar un café o distintas infusiones.
El descanso para reponer fuerzas fue de casi una hora, ya que puntualmente a las 13.00 se retomó la grabación. Todos volvieron caminando los escasos 20 metros que separan un inmueble de otro. Los últimos en llegar fueron Sergio Peris Mencheta y Óscar Jaenada, quien dará vida a un proxeneta mexicano dedicado a la trata de blancas. Lo hicieron juntos y hablando entre ellos, ajenos a las fotos y a todo aquel que pudiera reconocerlos.
En el polideportivo El Calvario, cercano a varios supermercados, se ubicó el centro de operaciones, y el lugar fue señalizado por la Policía Local con discos que advertían que se prohibía aparcar. Allí, los trabajadores de distintas empresas y de la productora se guarecían de la lluvia bajo una gran carpa montada esperando instrucciones. También se encontraban pequeñas rulones en las que se podía leer los nombres Hugo o Víctor, correspondientes a los personajes del film.
Sin embargo, la lluvia obligó a trasladar algunas cosas al terrero de lucha canaria ubicado a unos 50 metros. Como muestra de agradecimiento, la productora ha gratificado al Club Tijarafe Guanche con 500 euros, indicaron desde la institución.
Una trabajadora del recinto, que estaba preparando el campo para la disputa de hoy entre el citado equipo con uno del sur, contó que desde muy temprano “empezaron a guardar cosas en una de las salas” que “seguramente recogerán por la tarde-noche”.
Será en ese momento cuando el equipo se despida de Santa Úrsula para continuar el rodaje en la capital tinerfeña, que desde hoy y hasta el próximo mes sufrirá cambios en el tráfico.
Cambios en el tráfico en Santa Cruz
Las zonas afectadas serán el barrio de Cepsa, la parte alta de Ifara, Somosierra, la vertiente de Taco perteneciente al municipio, la zona baja del barrio de La Salud y Barrio Nuevo.
Respecto al plan de rodaje previsto hasta el momento, las restricciones de aparcamiento en el barrio de Cepsa se mantendrán en la calle Valle Inclán y vías adyacentes hasta el domingo. En Ifara, la afectación de la calle América González se concretará desde mañana y hasta el martes.
En Somosierra, y aunque la grabación se centrará en una vivienda, será necesario restringir el estacionamiento en la calle Dulce María Loinaz entre el 20 y el 28 de noviembre. El rodaje en Taco se comparte con La Laguna, entre el 26 y el 30 de noviembre. Se puede concretar que la zona afectada será la calle La Piconera y vías adyacentes.
Respecto a la zona baja del barrio de La Salud, se estima que haya prohibiciones de estacionamiento y cortes puntuales de tráfico en las calles Princesa Guayarmina, Príncipe Ruymán, Princesa Guacimara y vías adyacentes, entre el 26 y el 30 de noviembre. La última parada de esta producción audiovisual se centrará en Barrio Nuevo, donde se trabajará desde el 27 de este mes y hasta el 8 de diciembre.
El Rosario ha sido el lugar elegido para montar una cantina mexicana
El Rosario se incorpora a los escenarios por los que discurrirán las nuevas aventuras de John Rambo. El núcleo de Llano del Moro, en las inmediaciones de la plaza Gabriel Cruz y el cruce entre la carretera de La Esperanza a Llano del Moro (TF-272) y la calle San Francisco de Paula (TF-265), acogerá a partir de la semana que viene, el rodaje de una escena que recreará una secuencia en una cantina mexicana. La Policía Local emitirá un bando a partir de hoy, anunciado la afecciones al tráfico.
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