Lo que, en principio, iba a ser un viaje de placer o una vuelta a casa tranquila, se convirtió en un auténtico calvario a bordo. Los 200 pasajeros de un vuelo de la compañía Ryanair entre Praga y Madrid estuvieron retenidos más de seis horas dentro del avión “sin agua ni comida”. Al parecer, las condiciones meteorológicas impidieron el despegue del vuelo que, además, ya se había retrasado otras cinco horas por el mismo motivo.
Muchos de los viajeros han compartido su descontento a través de la red social de Twitter debido a que la aerolínea de bajo coste no informó acerca de la situación ni les proporcionó ningún tipo de sustento durante las horas de espera. Además, aseguraron que entre los pasajeros había niños, mujeres embarazadas e, incluso, una persona diabética.
Según relata uno de los afectados, la tripulación se negaba a abrir las puertas hasta que varias personas comenzaron a marearse. De hecho, el personal sanitario tuvo que atender a una persona que presentaba una crisis de ansiedad. Finalmente, Ryanair canceló el vuelo.
La compañía aérea publicaba en su cuenta oficial de Twitter a última hora de ayer que “uno de nuestros vuelos ha sido cancelado, ya que el retraso ha provocado que la tripulación se encontrase fuera de turno. Todos los clientes han recibido alojamiento. El vuelo operará el día de mañana”. Asimismo, ha pedido “sinceras disculpas a los clientes afectados”.
Esto está ocurriendo en el vuelo #FR2767 en Praga. Horas sin comer ni beber con niños, una embarazada y un diabético. @Ryanair_ES @policia pic.twitter.com/WcLi1C9kI3
— Argimiro Pérez (@Aargimiro) 3 de febrero de 2019
Qué alguien nos ayude @policia @guardiacivil @Ryanair_ES mirad el hilo #FR2676 Cerca de 200 españoles retenidos en un vuelo en Praga. No pueden darnos de comer y llevamos aquí 3 horas más 5 de retraso. Nadie nos da respuesta y dentro del avión hay ya una persona muy nerviosa pic.twitter.com/QLLZZByGRd
— Argimiro Pérez (@Aargimiro) 3 de febrero de 2019
