El presidente del Partido Nacionalista Canario (PNC), Juan Manuel García Ramos, ha vuelto a la carga en su afán de lograr la reunificación de las fuerzas nacionalistas de Canarias, cuyo primer intento serio (que dio lugar a lo que hoy es Coalición Canaria) fracasó tras la marcha de Román Rodríguez y sus partidarios en 2003, lo que a su vez dio lugar a la actual Nueva Canarias.
Para lograr tan ambicioso objetivo, el histórico líder nacionalista ha optado por convocar una suerte de cumbre del nacionalismo canario a la que han sido citado tanto dirigentes históricos como actuales de fuerzas como las ya citadas Coalición Canaria y Nueva Canarias, además de otros partidos insularistas como, por ejemplo, la Agrupación Herreña Independiente y Asamblea Majorera.
Tal y como ha informado el propio Juan Manuel García Ramos, dicha cumbre tendrá lugar “tras las vacaciones de verano”, y a la misma se “pretende citar a personalidades vinculadas a esta ideología como Tomás Padrón, Antonio Castro Cordobés, Jesús Machín, José Carlos Mauricio, Manuel Hermoso, Mario Cabrera, Paulino Rivero, Ana Oramas, Fernando Clavijo, Ricardo Melchior, José Miguel Ruano, Román Rodríguez, Carmelo Ramírez, Fermín Delgado, Chema Hernández Aguiar”.
A pesar de lo granado de esta relación, el espíritu con que se quiere dotar a esta cita es de apertura, por lo cual el líder del Partido Nacionalista Canario deja abierta la puerta a “otras individualidades por determinar vinculadas a la historia del nacionalismo más reciente”.
Como argumentario oficial para dicha cumbre del nacionalismo canario, García Ramos ha fijado dos cuestiones a modo de ejes para el debate, que se resumen en el siguiente párrafo: “Hay que debatir sobre lo que hemos podido hacer bien y mal durante estos veintiséis años de existencia, desde que Manuel Hermoso Rojas fuera investido presidente del primer gobierno nacionalista de la historia de las Islas Canarias un 31 de marzo de 1993, y sobre las posibilidades de una reunificación nacionalista en la perspectiva de la creación de un partido que dé respuesta a las necesidades de la defensa de nuestro territorio atlántico, de nuestra sociedad transversal y de nuestra cultura diferenciada”.
Autoridad moral
El hecho de que sea el presidente del Partido Nacionalista Canario (PNC), Juan Manuel García Ramos, quien convoque una cumbre del nacionalismo canario cuyo principal objetivo sea, por un lado, la siempre necesaria autocrítica, y, por otro, al ansiada reunificación en este sector político del Archipiélago, se encuentra plenamente justificada por la autoridad moral que le concede, precisamente, estar al frente del PNC.
Ello se debe a que, mientras el resto de partidos nacionalistas canarios actualmente en activo fueron creados tras el advenimiento de la etapa democrática actual, el PNC se remonta al 30 de enero de 1924, cuando vio la luz en La Habana , siendo su primer presidente el tipógrafo José G. Cabrera Díaz, quien había sido líder sindical de los trabajadores canarios, a tal punto que también fue el fundador de la Asociación Obrera Canaria. Desde un inicio, el PNC tomó a Secundino Delgado como referente ideológico.
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