Tras el inesperado anuncio que el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha hecho esta tarde de suspender su agenda pública unos días para decidir si sigue al frente del Ejecutivo, llegan las dudas.
Sánchez ha asegurado que necesita “reflexionar si merece la pena” tras las investigaciones y “ataques sin precedentes de la derecha y ultraderecha” a su mujer, Begoña Gómez.
Asimismo, ha informado que el próximo lunes, 29 de abril, comparecerá antes los medios para comunicar su decisión.
¿Qué podría pasar el lunes?
La decisión que Sánchez anunciará el lunes baraja distintos escenarios. El presidente podría elegir continuar en su cargo o bien someterse a una moción de confianza, en la que el Congreso de los Diputados deberá votar para dar o no su respaldo expreso al Ejecutivo.
Se trata de una instrumento político que se utiliza para afrontar una situación de debilidad del poder ejecutivo frente al Parlamento.
Gobierno en funciones
Si la decisión de Sánchez pasa por su dimisión, el artículo 101 de la Constitución establece que todo el Gobierno deberá cesar, pero se mantendrá en funciones hasta la posesión del nuevo Ejecutivo.
En este caso, tal y como lo especifica la Ley, las funciones del presidente serán asumidas por los vicepresidentes o, en su defecto, por los ministros. Es decir, que María Jesús Montero sería la presidente en funciones hasta la formación de un nuevo Ejecutivo.
Investidura de un nuevo presidente
En el escenario de que abandone el cargo y el Gobierno continúe en funciones, se dará paso a una nueva ronda de consultar para la investidura de un nuevo presidente.
Según el artículo 99 de la Constitución, el Rey propondrá un candidato a la Presidencia entre los representantes de cada partido parlamentario. El elegido deberá exponer ante el Congreso de los Diputados el programa político del Gobierno que pretende formar.
Será entonces cuando pida la confianza de la Cámara a través de un proceso de votación en el que deberá conseguir la mayoría absoluta (sí de la mitad de los diputados +1). De no lograrse, se hará una nueva votación 48 horas después de la anterior, en la que debería obtener la mayoría simple (más síes que noes).
Si tras la votación no se consiguen los votos suficientes, se propondrá un nuevo candidato. Si dos meses después de la primera votación, ningún candidato resulta investido, el Rey disolverá ambas Cámaras y convocará nuevas elecciones.
¿Nuevas elecciones?
En cualquier caso, no se podrían convocar elecciones generales, ya que, de renunciar Sánchez al cargo de presidente y quedar un Gobierno un funciones, el artículo 21.4 de la Constitución establece que este tipo de Ejecutivo no puede convocarlas.
Otra opción sería que, en lugar de dimitir, Sánchez convoque elecciones, algo que no podría hacer hasta el próximo 29 de mayo, pues el artículo 115 indica que no se puede proceder a la disolución de las Cortes antes de un año desde la anterior (cabe recordar que la última fue el pasado 29 de mayo de 2023).
De ser finalmente convocadas el 29 de mayo, habrá que contar 54 días para la celebración de unas nuevas elecciones, el mínimo establecido para celebrar los comicios. Esto supondrá que el 21 de julio sería el primer domingo disponible.
Antecedentes
Desde que comenzó la democracia, solo un presidente del Gobierno de España ha dimitido. Fue Adolfo Suárez, en 1981, que dio paso a la investidura de Leopoldo Calvo-Sotelo.
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