J. J. G. / E. P.
La directora general de Personal de la Consejería de Educación del Gobierno canario, Marisol Collado, aseguró ayer que el Archipiélago “se plantea distintos escenarios” sobre la posible vuelta a las aulas atendiendo a las decisiones de las autoridades sanitarias, y que la Consejería comprará unas 10.000 tabletas para los alumnos sin recursos.
Tras la reunión de la Comisión general de Educación entre el Ministerio y los representantes de todas las comunidades, el Estado solicitó los distintos planteamientos de las regiones respecto al tercer trimestre escolar donde se deben relatar desde los aspectos curriculares a la evaluación y la posible incorporación a las aulas, para abordarlos en la reunión de la Conferencia Sectorial prevista para el 15 de abril, en la que participarán la ministra y las diferentes consejeros para adoptar decisiones consensuadas respecto al curso escolar.
“Estamos esperando las decisiones de las autoridades sanitarias, y plantearemos distintos escenarios posibles de incorporación o no a las clases en función de esas decisiones sanitarias. Estudiamos que la formación sería competencial, más centrada en proyectos globales que en materia, y la evaluación que tiene que ser formativa y continua. Y en cuanto al final del curso, estará supeditado a lo que digan las autoridades”, señaló Collado, quien se mostró preocupada por el alumnado de Formación Profesional, “que no tiene la maquinaria para continuar con su formación en sus casas, ni las prácticas en centros de trabajo”.
En la reunión, de carácter técnico, se trataron “aspectos jurídicos muy importantes”, como en el caso de F.P., “la formación en centros de trabajo y la flexibilización de prácticas en empresas”; o en el caso de la EBAU, “las fechas y el cambio de modelo de examen que fue aprobado”, señaló la directora general de Personal.
Compra de tabletas
Se han sustituído las clases presenciales por la formación online, pero no con todas las garantías”, continuó Collado. “Hemos pedido a los centros un diagnóstico de todo lo que está pasando. Queremos que todos los alumnos puedan acceder a los contenidos. Nos encontramos con una brecha digital con diferente casuística: falta de dispositivos, falta de acceso a datos o una pobre estabilidad de la red”, dependiendo de la zona. La Consejería paliará esas realidades, “multiplicando la potencia de las redes y poniendo a disposición del alumnado tarjetas SIM y dispositivos electrónicos. Planteamos comprar entre 8.000 a 10.000 tabletas para estos alumnos”.
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