En un mundo prepandemia, Ópera de Tenerife había programado para los días 17, 19 y 21 del pasado mes de marzo Lucrezia Borgia, el título de Gaetano Donizetti, en una coproducción con el Teatro Comunale di Bologna, Ópera de Oviedo y el Teatro de la Maestranza de Sevilla.
Pero esas funciones en el Auditorio de Tenerife nunca se celebraron y desde entonces han transcurrido ocho meses en un calendario trágico del que prácticamente nadie ni nada, tampoco la música, la cultura, han podido librarse.
Sin embargo, ahora, en medio de unas circunstancias que no son las mejores, el trabajo y la ilusión de mucha gente propician que al fin el escenario capitalino reciba hoy martes, 24 de noviembre, a partir de las 19.00 horas, esta Lucrezia Borgia que viaja al siglo XX, a la Italia fascista de Mussolini, merced a Silvia Paoli (dirección de escena), Andrea Belli (escenografía), Valeria Donata Bettella (diseño de vestuario) y Alessandro Carletti (diseño de iluminación). Y ha sido tanta la expectación ante la primera ópera de la temporada 2020-2021 (el segundo título en la programación; el primero fue el Réquiem de Donizetti, en homenaje a los fallecidos por el coronavirus), que las entradas para la representación de hoy, la del jueves y la del sábado se encuentran agotadas.
De manera que cuando esta tarde, nada más levantarse el telón, comience a tomar forma la ópera de Donizetti, interpretada por la Orquesta Sinfónica de Tenerife, bajo la dirección de Andriy Yurkevych, un elenco de cantantes encabezado por Yolanda Auyanet, Antonino Siragusa, Simone Alberghini y Na’ama Goldman, el Coro de Ópera de Tenerife y una amplia relación de figurantes, habrá mucho que celebrar. Sin duda.
Hemeroteca
Publicidad
Esquelas