La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha ensalzado la valiente decisión del líder de Podemos, Pablo Iglesias, de dejar el Ejecutivo de coalición para ser candidato a la Comunidad de Madrid y asume como un “honor” ser el reto de ser “vicepresidenta”.
Así lo ha indicado en Twitter tras el sorprendente anuncio de Iglesias de ser candidato en Madrid y ceder en ella el rango de vicepresidenta que le corresponde a Unidas Podemos dentro de la coalición, así como el próximo liderazgo del espacio político al presentarla como futura candidata en los próximos comicios generales.
En su comentario en redes, Díaz ha recalcado que llegaron a la política para “cambiar las cosas y mejorar la vida de las personas”, algo que Iglesias siempre ha “defendido”.
“Lo demostró en el Gobierno y lo sigue haciendo ahora, con esta valiente y necesaria candidatura, que unirá, con fuerza e ilusión, al Madrid que más queremos”, ha desgranado la titular de Trabajo, que adjunta su mensaje en redes con una fotografía junto al aún vicepresidente segundo.
RETO QUE ASUME
A su vez, ha recordado que durante el último año ha puesto “todo su esfuerzo en la protección del empleo y de las personas trabajadoras” y que a esta labor, “siempre de la mano del diálogo social, se une ahora el reto de la Vicepresidencia.
“Será un honor seguir trabajando en este Gobierno y con @sanchezcastejon”, ha concluido sin hacer mención a la clave interna de Unidas Podemos, al recaer ahora sobre ella el liderazgo de este espacio político.
Por tanto, se convertirá en la dirigente de Unidas Podemos con más poder institucional al ascender al rango de vicepresidenta, algo que el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aceptará.
SUCESIÓN CALMADA EN TORNO A DÍAZ
El movimiento de Iglesias tiene una clave interna y es el asociar un relevo calmado y tranquilo en Unidas Podemos en torno a Díaz, la ministra más valorada de este espacio político en diversas encuestas y en ascendente popularidad.
Su figura se ha revalorizado con su gestión al frente del Ejecutivo, reivindicada por multitud de cargos de Unidas Podemos por su capacidad de llegar a acuerdos sociales y desplegar medidas de protección a los trabajadores ante la crisis del Covid-19.
En las filas moradas piensan que el anuncio de Iglesias, al avalar a Díaz como próxima candidata a las próximas elecciones generales y auspiciar su rango de vicepresidenta, prepara el terreno para armar un nuevo liderazgo de cara a los futuros comicios, previstos dentro de dos años y medio.
“Creo que digo algo que sienten millones de personas de izquierdas en toda España si digo que Yolanda Díaz puede ser la próxima presidenta del Gobierno de España. La gente de Podemos, la gente de IU, de En Común Podem, y de izquierdas de este país tenemos que apoyar a Yolanda Díaz para que si ella así lo decide y así lo quiere la militancia de nuestras organizaciones sea la candidata de Unidas Podemos en las próximas elecciones generales y la primera mujer en ser presidenta del Gobierno de España”, apostilló el líder de Podemos durante su vídeo para explicar su renuncia a seguir en el Ejecutivo para medirse a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, el próximo 4 de mayo.
El propio Iglesias ya apuntó que el futuro liderazgo de Unidas Podemos debía ser femenino y destacando perfiles potentes que se forjaban en el Gobierno de coalición, como es el caso de la propia Belarra, una de sus principales colaboradoras y negociadora con el PSOE en diversas medidas, o la ministra de Igualdad, Irene Montero. Durante estos meses y en diversas intervenciones y entrevistas lanzaba esa opción. En una reciente y al ser cuestionado por la opción de Díaz como candidata respondió: “¿Quién sabe? ¿Por qué no?”.
El aún vicepresidente ha explicado que su amistad con Díaz se remonta desde hace años y fue asesor de la actual ministra de Trabajo durante su candidatura a las elecciones gallegas de 2012.
Abogada laboralista, Díaz ha desplegado una vocación tendente al diálogo social y acuerdos sectoriales. Además, se ha mostrado más conciliadora y prudente a la hora de valorar públicamente las tensiones con el PSOE dentro del Ejecutivo. Sin embargo, ha reivindicado al igual que otros cargos de Unidas Podemos el cumplimiento del acuerdo de coalición.
En este sentido, defendió la necesidad de aumentar este 2021 el salario mínimo interprofesional, la defensa de la revalorización de las pensiones y la necesidad de avanzar en la derogación de la reforma laboral del PP, entre otras cuestiones.