Inocencio González se encamina hacia la reelección como secretario general de CC.OO. en Canarias, un sindicato que contabiliza alrededor de 38.000 afiliados (4.300 más en estos cuatro años) y 3.300 delegados.
-Cuatro años de dirección en las Comisiones Obreras canarias. ¿En qué grado se han ejecutado los objetivos?
“Me siento absolutamente satisfecho. Hemos hecho mucho por la cohesión interna”.
-¿En qué fase se encuentra el proceso congresual?
“Se han celebrado el 60% de los congresos”.
-¿Por qué cauces?
“Por los de la unidad. Candidaturas únicas y niveles de integración como nunca, con la misión de ser un sindicato útil”.
-¿Sin confrontación?
“¡Consenso! Eso refleja madurez y compromiso con el conjunto de la ciudadanía”.
-¿Activismo pragmático?
“Estamos convencidos de que el esfuerzo debe estar con la gente, asesorando y luchando por los derechos laborales”.
-Más acción y menos retórica, en consecuencia…
“En efecto”.
-¿Cuándo será el regional?
“El 29 de junio”.
-¿Qué sensaciones ha dejado este Primero de Mayo de nuevo en la calle, tras el telemático del año pasado?
“En principio, que es necesario volver al método tradicional. Evidentemente, siendo consecuentes con la situación”.
-Para CC.OO. y UGT era la culminación de unas movilizaciones para reclamar el cumplimiento de la agenda social…
“El 11 de cada mes; menos en abril, que la pasamos al lunes 12. La idea era poner la agenda social sobre la mesa”.
-De baja intensidad…
“Hicimos concentraciones de delegados para ir probando”.
-¿Salió como intuían?
“Sí, bueno… Estaba dentro de una campaña confederal de las dos organizaciones”.
-¿Ahora sí toca?
“Con ese eslogan poníamos el foco en tres elementos que nos parecen fundamentales”.
-Que son…
“La revisión de la reforma laboral, el sistema de las pensiones y el incremento del salario mínimo interprofesional”.
-¿Cómo va la negociación?
“Las dos primeras mesas tripartitas, con el Gobierno y las patronales, están constituidas”.
-¿Por qué no se ha creado la del salario mínimo?
“Detrás hay una historia que a veces lleva a que uno se plantee si se equivoca o no”.
-¿Están mareando la perdiz?
“Se nos fue el año 2020 sin un acuerdo. El Gobierno nos trasladó que igual necesitábamos más tiempo”.
-¿Sincronizaron los relojes?
“Se decidió, a efectos legales, prorrogar el SMI de 950 y se ha dilatado en el tiempo”.
-¡No llega la hora!
“Sería muy complicado alcanzar en 2023 un SMI equivalente al 60% del salario medio”.
-¿No se dan cuenta?
“No hablamos de grandes aumentos. Además, afecta a los colectivos que en peores condiciones están”.
-¿Cuántos trabajadores se beneficiarían de la subida?
“Casi dos millones y medio son los que más lo notarían”.
-¿Hacia dónde orientan la reforma laboral?
“Nosotros nos centramos en cuatro aspectos”.
-El meollo de la cuestión…
“La ultraactividad, la referencia del convenio sectorial sobre el de empresa, las subcontratas y los descuelgues”.
-El chocolate espeso y el café expreso…
“Preferimos avanzar por capítulos; porque, si se incorporan otros elementos, nos distraemos en la complejidad”.
-¿La derogación es una solución pertinente?
“¿Derogamos todo y empezamos de cero? Hay que ser realistas y lograr lo sustancial”.
-¿Qué hay del periodo de cálculo de las pensiones?
“Querían elevarlo de 25 a 35 años. Lo han retirado”.
-¿El poder adquisitivo?
“Hemos pactado que se revalorice en base al IPC”.
-¿Y la sostenibilidad?
“Ese es otro factor clave. No puede ser que el sistema público de pensiones sea eternamente deficitario”.
-¿Cómo se equilibra?
“Introduciendo diferentes medidas, que están contempladas en el pacto de Toledo”.
-¿Se han definido?
“Las propuestas del Gobierno van dirigidas más bien a reducir costes. Nosotros incidimos en los ingresos”.
-Para que funcione, ¿habría que jubilar el sistema?
“Yo creo que habría que rejuvenecerlo, no enterrarlo”.
-Los ministros discrepan entre sí, se contradicen…
“El ministro de Seguridad Social, [José Luis] Escrivá, dice una cosa ante un micrófono y a los dos días, la contraria”.
-¿En qué ha quedado lo del impuesto especial?
“¡Ni idea! Lo que nos han presentado en el diálogo social es ambiguo y escaso”.
-¿No se exponen a que lo pactado caduque antes de que entre en vigor?
“Afrontar la recuperación con las mismas herramientas significaría que pagaríamos una factura en empleo”.
-Esta crisis ha explicitado la importancia de los ERTE y de los servicios públicos…
“Si duda. Y también ha destapado las debilidades colectivas como sociedad”.
-El expediente de regulación temporal de empleo no es una figura nueva…
“Se ha adaptado a las circunstancias actuales”.
-Estaba enunciada y la desarrolló Fátima Báñez en 2012…
“Los ERTE tradicionales se utilizaban muy poco. Los hemos acomodado y han sido la mejor compañía en esta crisis”.
-Un balón de oxígeno…
“Llegamos a tener protegidos, y no en el desempleo, a más de 3.500.000 trabajadores”.
-¡Una cifra colosal!
“En Canarias, en el pico más alto, abril de 2020, había unos 232.000 trabajadores”.
-¿Han amortiguado el golpe del paro?
“Por primera vez hemos tenido unas tasas de desempleo inferiores a la caída del producto interior bruto”.
-¿El escudo social?
“En la gestión de los derechos sociales estamos regular. Pero los servicios públicos esenciales han estado a la altura”.
-¿Se han revitalizado?
“A pesar de los recortes”.
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