nacional

Rebelión a bordo del PP

Casado, que se niega a dimitir, resiste tras su enfrentamiento con Ayuso y Feijóo no descarta postularse ante un congreso extraordinario del partido que parece inevitable
Casado convocará a la junta directiva nacional del PP la próxima semana para un posible congreso, mientras Feijóo y Ayuso denuncian que la situación es “insostenible”. DA

Por M.A. Ruiz Coll | El presidente del PP, Pablo Casado, ha convocado para el próximo lunes una reunión de la Junta Directiva Nacional, el máximo órgano del partido entre congresos, para decidir la fecha del próximo congreso nacional del partido. Así lo decidió ayer el Comité de Dirección tras nueve horas de debate interno. Sin embargo, el enfado de Juanma Moreno por coincidir con el Día de Andalucía obligó a cambiar la fecha. Probablemente será el martes.

El Comité de Dirección comenzó a las once de la mañana y se prolongó hasta casi las 8 de la tarde. Pese a la intención de Pablo Casado de mantener el congreso nacional en julio, como estaba previsto, las presiones de los barones y las intervenciones de algunos miembros de la dirección le han llevado a alterar el plan inicial. Habrá congreso extraordinario y la Junta Directiva Nacional lo marcará en el calendario la próxima semana. A lo largo de la tarde iban llegando a la sede de la calle de Génova varios diputados y presidentes provinciales del PP para mostrar su apoyo a Casado. El equipo del presidente intentó transmitir así una imagen de fortaleza frente al pulso de los dirigentes territoriales, encabezados por el gallego, Alberto Núñez Feijóo. Solo quiso hacer declaraciones el portavoz, del PP de Almería, Ramón Herrera, que reveló que había encontrado a Casado con mucho ánimo para continuar al frente del partido.

La larga jornada acabó con una noche de nervios. Al abandonar la sede, la presidenta del Comité de Derechos y Garantías, Andrea Levy, fue increpada por varias personas al grito de “¡Casado, dimisión!”.

Los estatutos del PP señalan que la celebración de un congreso extraordinario exige debate previo, fijado en el orden del día de la Junta Directiva y resolución final de convocarlo adoptada “por la mayoría de dos tercios de los componentes de aquella”, que supera los 300 miembros. La Junta Directiva Nacional la puede convocarla el presidente del partido, pero también, con carácter extraordinario, por acuerdo del Comité Ejecutivo Nacional o a solicitud de tres quintos de sus vocales. El plazo mínimo que habrá de mediar entre la convocatoria y la de celebración “será de mes y medio si se trata del congreso nacional”. Eso sí, podrá ser convocado un congreso extraordinario “en casos de excepcional urgencia, con tan solo treinta días de antelación, haciendo constar en la convocatoria el motivo de convocar y las causas que fundamentan la urgencia”.

Casado se mantiene firme en su posición, a pesar de las presiones, ya casi unánimes, para que “dé un paso a un lado”. Según fuentes muy cercanas al líder del PP, este no dimitirá ni convocará anticipadamente el congreso nacional. En concreto, desde el entorno del presidente comparten con El Español que Casado y su equipo han decidido “agotar el mandato democrático” que recibieron del congreso del PP celebrado en julio de 2018. Antes del desenlace del capítulo de ayer, las citadas fuentes reiteraron que “ninguno” de los órganos se iba a adelantar, porque Casado y la cúpula nacional “no están dispuestos a que el partido se reparta en trozos”. Y ese es el temor en Génova, que haya ya un pacto entre Alberto Núñez Feijóo e Isabel Díaz Ayuso. A él habría que añadir la división interna en la misma reunión del Comité de Dirección. Belén Hoyo, presidenta del Comité Electoral y diputada, tomaba la palabra a última hora, antes del receso para el almuerzo y exigía la dimisión o la destitución inmediata del secretario general, Teodoro García Egea. A la rebelión se unió incluso la vicepresidenta del Congreso y exministra Ana Pastor.

Pablo Casado citó este domingo, de urgencia, al Comité de Dirección. En Génova se barrunta que el motín silencioso culmine definitivamente en un acuerdo entre Feijóo y Ayuso, si bien el equipo de Casado dice “contar con la mayoría de los presidentes provinciales”. Es más, fuentes del grupo parlamentario Popular confirman a este diario que decenas de diputados y senadores recibieron una llamada al mediodía para conminarles a acudir a la sede nacional por la tarde.

TE PUEDE INTERESAR