El Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha ratificado en un nuevo auto la suspensión cautelar del catálogo de vestigios franquistas aprobado por el Gobierno de Canarias, aunque su contenido ya fue publicado en el Boletín Oficial de Canarias, requisito que exigía la misma sala en un auto anterior.
En un nuevo auto, esta vez a instancia de la Asociación para la Investigación y Protección del Patrimonio Histórico San Miguel Arcángel, la sala de los contencioso administrativo del TSJC asegura que, aunque el Gobierno de Canarias ha subsanado el requisito de publicar el catálogo, subsisten otros dos motivos para mantener su suspensión cautelar, aunque uno de ellos es literalmente el mismo que a la vez reconoce que se ha corregido.
En el auto, contra el que se ha presentado recurso de reposición pendiente de tramitar, la sala cita tres motivos para la suspensión cautelar del catálogo: “1.- La falta de publicación íntegra del Catálogo 2.- La falta de Audiencia pública en el procedimiento 3.- La falta de publicación íntegra del Catálogo” (sic).
El TSJC reconoce expresamente que el primer punto, “la falta de publicación íntegra del Catálogo”, ha sido subsanado por el Gobierno de Canarias con su publicación en el BOC el 10 de mayo.
Pero al mismo tiempo añade que “subsisten” el segundo motivo de suspensión cautelar (la falta de audiencia pública) y también el tercero, que, es “la falta de publicación íntegra del Catálogo”, de acuerdo con el auto de esta sala del TSJC, presidida por Juan Ignacio Moreno-Luque Casariego y formada también por Jaime Guilarte Martín-Calero y Evaristo González González.
La sala había suspendido ya el catálogo en un auto anterior a instancias de la Asociación Reivindicativa de la Memoria Histórica Raíces, la misma que defendía en los tribunales de Madrid que se retirara el nombre de una calle al presidente del Gobierno de la República Francisco Largo Caballero.
Con el catálogo tampoco está de acuerdo el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, cuyo equipo de gobierno, formado por CC y PP, considera un agravio que el Gobierno solo incluya los vestigios franquistas de la capital tinerfeña, pero no de otros municipios.
A instancias de la Asociación para la Investigación y Protección del Patrimonio Histórico San Miguel Arcángel, el TSJC ya protegió cautelarmente el monumento de homenaje a Franco en el centro de Santa Cruz de Tenerife, en tanto se resuelve un recurso contra la decisión del Cabildo de no declararlo bien de interés cultural.