El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación ha emitido una advertencia ante la presencia de una plaga invasora que amenaza los ecosistemas acuáticos de España: el caracol de la manzana. Esta especie, identificada por sus larvas rosadas, es un molusco gasterópodo originario de la cuenca amazónica que ya ha sido clasificado como una de las cien especies invasoras más dañinas a nivel mundial.
Desde su primera aparición en el Delta del Ebro, en la provincia de Tarragona, en 2009, este molusco ha sido un problema creciente para los arrozales y otros cultivos acuáticos de la región. Aunque se logró contener su avance en zonas como el Baix Empordà en Girona en 2015, la amenaza sigue latente. Según fuentes ministeriales, la resistencia y voracidad de esta especie suponen un peligro significativo para los cultivos, especialmente en las áreas afectadas por su capacidad de adaptarse a condiciones adversas.
El caracol de la manzana, cuya llegada a Europa ha sido en parte facilitada por su venta ilegal como mascota en acuariofilia, ha sido declarado una plaga de cuarentena por la Unión Europea. Esta clasificación refleja la seriedad de su impacto potencial sobre la agricultura y la biodiversidad local, como se recoge en una Decisión de la Comisión Europea.
La página oficial del Ministerio subraya la importancia de que cualquier ciudadano que detecte larvas rosadas o ejemplares de este caracol informe inmediatamente a las autoridades competentes en Sanidad Vegetal o en el ámbito fluvial. En el caso del Delta del Ebro, la Confederación Hidrográfica del Ebro está encargada de gestionar las medidas de contención y erradicación de la especie.