Uno de los dos acusados de robar una caja registradora vacía en un centro comercial de Adeje ha declarado este lunes en la Audiencia de Santa Cruz de Tenerife que actuó en solitario.
La Fiscalía rebajó su petición de penas iniciales de 4 a 3 años para quien asume la autoría, y de 5 a 4 al segundo, al ser ambos reincidentes en este tipo de delitos de robo con fuerza.
El primero admitió que sobre las 6 de la mañana del 4 de mayo del pasado año rompió el cristal de un local de delicatessen mientras que, según dijo, el segundo de forma casual estaba en los alrededores. Su abogada pide que la condena sea ajustada a los hechos reconocidos.
El otro procesado justificó que estuvo en los alrededores porque el centro comercial está al lado del pasillo de un hotel por el que se puede ir a la playa de La Troya, pero no había visto al acusado, y negó cualquier tipo de complicidad con el mismo.
Su abogado pide la absolución al no probarse su culpabilidad de forma rotunda y la existencia de dudas razonables que no justifican una condena.
Por ejemplo, que desde el centro comercial hasta la playa donde fue detenido por el presunto robo de un móvil poco después se tarda una media hora en llegar.
El primer encausado fue localizado una hora más tarde en una avenida.
Los policías ratificaron que ambos eran delincuentes habituales, por lo que no dudaron a la hora de reconocerlos en las imágenes de las cámaras de seguridad.
Creen que se repartieron los papeles y mientras uno entró en el local el otro vigilaba, y recalcaron que no era la primera vez que actuaban juntos.
En la actualidad los dos están en prisión provisional por estos hechos al incumplir la suspensión de penas por condenas anteriores.
La responsabilidad civil se fija en casi 250 euros, cantidad que se corresponde al valor del cristal del escaparate roto para poder entrar en el local. El dueño reclama este pago y dice que el año anterior los dos le habían robado también.
La Fiscalía no alberga dudas de que ambos idearon un plan con el fin de obtener dinero y de esta manera acudieron a un establecimiento comercial.
Hemeroteca
Publicidad
Esquelas