Una marea humana recorrió este jueves las calles de las principales áreas turísticas del sur de Tenerife. Entre petardos, tambores, pancartas y gritos de protesta, la hostelería salió a la calle para exigir mejores condiciones laborales. En cuanto a la participación, Sindicalistas de Base cifró en torno a 5.000 las personas que se movilizaron. La Delegación del Gobierno en Canarias, según datos facilitados a Europa Press, estimó la asistencia en unas 2.000 personas.
La concentración avanzó por la avenida Rafael Puig, desde Verónicas hasta la Milla de Oro de Playa de Las Américas, con paradas frente a hoteles emblemáticos.
En ese sentido, la manifestación, aún coincidiendo con otros eventos masivos como la Pasión de Adeje o un festival en La Caleta que atraerá a cerca de 10.000 personas, logró captar la atención de los medios y de numerosos turistas, que acabaron sumándose a la marcha.
“Esclavos no, trabajo sí”, se coreaba entre la multitud. Carteles, camisetas reivindicativas y un ambiente de hartazgo, pero también de unidad y determinación. La manifestación fue pacífica, sin altercados ni daños materiales.
“Si esto sigue así, habrá una huelga general de carácter indefinido”
Desde los sindicatos, la lectura es clara: el seguimiento y la movilización prueban que el conflicto no va a apagarse sin respuesta institucional. “Esta huelga ha sido un éxito”, afirmó Manuel Fitas, secretario de comunicación de Sindicalistas de Base. “Todos los trabajadores han estado en las puertas de sus centros de trabajo. La hostelería ha dicho basta, y esta manifestación es prueba de ello. La sociedad canaria apoya al 100% esta huelga”.
Fitas hizo un llamamiento directo al presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo: “Tiene que tener cuidado. Hay que convocar una reunión urgente y llegar a un acuerdo con la máxima rapidez. Desde este sindicato se pretende convocar una huelga indefinida si no hay avances”.
El tono sube de nivel con una metáfora que ya circula entre los trabajadores: “Ante la prepotencia de la patronal y el famoso papel en blanco, nosotros escribiremos tres folios en él. Y si esto sigue así, habrá una huelga general de carácter indefinido”.
Grandes diferencias salariales entre el norte y el sur
Eduardo Emmanuel, delegado sindical de Sindicalistas de Base en un hotel de la capital tinerfeña, explicó con emoción la implicación de los trabajadores en la convocatoria de la capital tinerfeña que, a su juicio, no reciben las mismas condiciones que los trabajadores sureños.
Emmanuel no escatimó en palabras: “Esto tiene que acabar. Los grandes empresarios no nos respetan. En Santa Cruz cobramos entre 300 y 350 euros menos que en el sur, haciendo el mismo trabajo y bajo las mismas presiones”. Señaló directamente la precariedad estructural del sector: “Las camareras de piso no llegan a los 60 años. Van empastilladas al trabajo por las condiciones. Conozco miles de casos. Les exigen hasta 15 habitaciones al día. Y la salud mental está destrozada”.
También denunció una dinámica de sobrecarga laboral sostenida en el tiempo: “Cada año se pide más y no se da nada. Los jefes se descargan de trabajo y lo cargan en los de abajo”.
Se espera que las próximas semanas sean clave para conocer la respuesta institucional. Mientras tanto, los trabajadores han mostrado una alta participación en las movilizaciones.
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