El Ministerio del Interior observa con tensión y cautela el partido que este martes jugarán España y Marruecos en los octavos de final del Mundial de Qatar. Por eso, en diversas zonas del país cuerpos como la Policía Nacional o los Mossos d’Esquadra han puesto «en alerta» a sus unidades antidisturbios, en previsión de que se produjeran disturbios derivados de las celebraciones del encuentro.
Hay varias notas internas del departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska que apuntan en la línea de la prevención. En una instrucción a la que ha podido acceder EL ESPAÑOL, la Dirección Adjunta Operativa (DAO) de la Policía Nacional ordena expresamente que «se hace necesario reservar para esa tarde, noche, UIP’s (antidisturbios), UPR’s (prevención y reacción), y tener previsos dispositivos específicos».
La DAO, y así lo enuncia en esa instrucción interna, estima que esta medida se vuelve oportuna e imprescindible «ante la previsión de celebraciones que pudieran llevar aparejadas alteraciones de orden público, como ya ha pasado en otros países».
Ese episodio al que se refiere la cúpula de la Policía Nacional ocurrió hace algo más de una semana en Bruselas. La victoria de Marruecos sobre Bélgica en la segunda jornada del Mundial dejó unas imágenes completamente inesperadas.
Batalla campal
Los aficionados de la selección del norte de África residentes en la capital salieron a las calles para celebrar la gesta, y a su paso dejaron gran cantidad de destrozos en establecimientos, automóviles y mobiliario urbano.
La policía terminó interviniendo en las calles en lo que terminó siendo una batalla campal. Se destrozaron coches, se quemaron contenedores, se prendió fuego a patinetes y cubos de basura. Los agentes tuvieron que disuadirles con cañones de agua, gas lacrimógeno y tanquetas. Dos horas después el saldo era casi una veintena de detenidos.
En la misma nota, y ante los precedentes en esa y otras ciudades europeas como Róterdam, la DAO de la Policía Nacional pide a cada una de las jefaturas repartidas por el territorio que mantengan a todos los agentes antidisturbios disponibles esa jornada, en orden de reserva por si acaso fuera necesario desplegarles en según qué ciudad.
En la nota la DAO reconoce la dificultad de estimar el número exacto de policías que se van a necesitar en cada región. «Lo único objetivo con lo que contamos son el número de marroquíes que están empadronados en cada una de vuestras comunidades». Y termina: «Aquellas Jefaturas que consideréis que necesitan refuerzos me lo vais comunicando».
«Unidades en alerta»
Los mandos policiales consultados por EL ESPAÑOL consideran un España-Marruecos como un partido de alto voltaje. Al nivel de un Barça-Madrid. Por eso han establecido esa orden de reserva para que los antidisturbios de cada una de las secciones estén activos esa jornada en previsión de lo que pueda pasar. «Gane o pierda España. Gane o pierda Marruecos», cuentan efectivos policiales.
Cataluña es una de las regiones en las que más se velará por la seguridad antes, durante y después del partido. Fuentes de los Mossos d’Esquadra, encargados de la seguridad urbana en la región, relatan que algunas comisarías han solicitado ya voluntarios para alargar la jornada y comenzarla antes. De momento piden esto para obtener refuerzos.
«Hay dispositivos en todo el territorio. Todas las unidades de orden público en alerta», explica otra fuente de los Mossos d’Esquadra a este diario. Mossos cuentan con 1.300 agentes de orden público repartidos por las cuatro provincias catalanas.
La totalidad de esa unidad estará activa este martes, en previsión de posibles disturbios como los que se han producido en otros países.