Helen Robinson, de 47 años y madre de siete hijos, ha decidido adelantar la Navidad al mes de octubre para poder disfrutarla junto a los suyos. Lo ha decidido así después de enterarse de que le quedan dos semanas de vida. Robinson sufre un cáncer de mama que se ha extendido hasta sus pulmones, según informó Liverpool Echo.
La mujer está siendo sometida a cuidados paliativos y no ha querido desaprovechar la oportunidad de vivir unas fechas tan significativas junto a sus hijos.
Su marido, Stephen Robinson, empezó a su vez una campaña para reunir fondos y poder pagar una “Navidad especial” y, por otra parte, cubrir los gastos del funeral de su esposa. Stephen y Helen se conocieron en el colegio y se casaron hace más de 30 años.