Los sindicatos SITCPLA y USO, que representan a la plantilla de tripulantes de cabina y pasajeros de Ryanair en España, han decidido este miércoles convocar una huelga «contra el comportamiento abusivo» de la aerolínea ‘low cost’ y ante la intención de cerrar las bases de Gran Canaria y Tenerife en enero, así como la de Girona, aunque esta con fecha por determinar.
Los sindicatos hacen este anuncio tras asistir a una reunión de mediación por la constitución de la mesa negociadora del convenio colectivo. Al respecto, el secretario general de USO-Ryanair, Gustavo Silva, aseguró que están «consternados ante la actitud de la empresa» y, sobre todo, admitió que sienten «rabia por su manera de actuar, basada en constantes atropellos a su plantilla».
Por ello, apuntó en un comunicado, que aunque «no» tienen aún fecha para la huelga, atendiendo a los plazos legales establecidos, se prevé que sea en septiembre. Silva subrayó que la huelga viene motivada por lo tratado en la reunión para la constitución de la mesa negociadora del convenio donde los representantes de la compañía han solicitado tener otro encuentro «sin los mediadores», además de anunciar su intención de cerrar las bases de Gran Canaria y Tenerife Sur «el próximo 8 de enero, además del posible cierre de Girona, sin fecha, y de anunciar despidos en general».
«Es injustificable este victimismo de supuestas pérdidas, cuando es una empresa en constante aumento de beneficios y que, por delante, quiere efectuar despidos y, por detrás, está en pleno proceso de reclutamiento de personal con varios procesos abiertos, algunos de ellos en España», apuntilló el vocal de SITCPLA, Manuel Lodeiro.
Por último, sobre el convenio colectivo, tanto Silva como Lodeiro, critican que Ryanair intentara «modificar el acuerdo firmado el pasado 9 de enero en las propias bases de constitución de mesa, incluyendo nuevas cláusulas tan absurdas como trasladar las reuniones del convenio español a Dublín». Además acusan a la compañía de llegar a la mediación «como siempre, pisoteando las instituciones y la legislación laboral española, al convertir una mediación en una reunión para decir lo que a ellos les interesaba».