Santa Cruz de Tenerife ha amanecido hoy con una sorpresa para algunos de sus vecinos: una multa. Agentes de la Policía Local de la capital tinerfeña sancionaron durante la madrugada del martes al miércoles a los vehículos que se encontraban aparcados sobre línea amarilla.
Sin embargo, según cuenta uno de los afectados a este periódico, son zonas donde los coches siempre han estado estacionados allí «sin ningún problema». Afirma que, debido a la ampliación de las terrazas en el municipio por las restricciones en la hostelería, es muy complicado aparcar.
Algunas de las zonas en las que el citado cuerpo policial ha actuado son la calle Salamanca, la calle de Goya o los alrededores de la plaza de los Patos, entre otras.