Las últimas horas están siendo muy agitadas entre los dirigentes canarios de la práctica totalidad del arco parlamentario, ante la incertidumbre sobre el futuro del pacto que Coalición Canaria (CC) y el PSOE suscribieron el 22 de junio de 2015. Estas gestiones se han trasladado a Madrid por parte de los nacionalistas, que intentan frenar, ante Génova, los contactos y mensajes entre socialistas y populares en las Islas.
La diputada de Coalición, Ana Oramas, que ha comprometido su apoyo a Rajoy en la eventual investidura, trata de abortar con ese poderoso argumento ante el PP (concretamente, ante la secretaria general, María Dolores de Cospedal) el diálogo entre populares y socialistas canarios, más que evidente desde que el pasado día 13 el presidente regional del PP, Asier Antona, declaró a DIARIO DE AVISOS que “con el PSOE es posible entendernos en Canarias; ya lo hicimos en La Palma”, algo que Julio Cruz (PSOE) celebró: “Hay que avanzar en ese diálogo; no es imposible entendernos”.
Antona reconoció esta semana que su partido ha tenido “tentaciones” desde CC y PSOE tras la crisis de su pacto de gobierno, pero aseguró que las ha “evitado” para “no alimentar más ruido ni generar más inestabilidad” política en las instituciones canarias.
Pese a que todo apunta a que la entente entre el PSOE y CC en el Gobierno se ha ido recomponiendo, tras llegar a su punto más álgido hace tres semanas, la mera sospecha de que pueda explorarse en las Islas por primera vez una mayoría entre el PP y el PSOE, a rebufo de un nuevo ciclo en Madrid, aconseja a los nacionalistas mover hilos a toda prisa en la capital del Reino al más alto nivel. Siempre han preferido entenderse con las cúpulas nacionales del PP o el PSOE, bajo el estigma de “medianeros” hacia sus dirigentes locales. El acuerdo con el PSOE lo firmó Clavijo con Sánchez. Y ahora Oramas interactúa con Cospedal.
CC se malquistó con su socio el 27 de septiembre al arrebatarle la alcaldía de Granadilla, tras enfrentarse con los consejeros del PSOE de Sanidad y Obras Públicas, y el pacto quedó en situación de “interinidad”, según CC, que puso un ultimátum para que su aliado diga “esta semana” si rompe o mantiene a Clavijo en la presidencia tras 15 meses (tomó posesión el 11 de julio de 2015).
“Espero que no se traslade lo de Madrid a Canarias”, dijo Clavijo anteayer en Las Palmas ante la posibilidad de pactos autonómicos si Rajoy forma gobierno con ayuda del PSOE. No obstante, los socialistas parecen decididos a reconducir y estrechar su acuerdo con CC. Hoy está previsto celebrar una reunión informal de la mesa de seguimiento de ese pacto. ¿Qué se cuece en Madrid? Si el domingo, el comité federal del PSOE acuerda abstenerse ante Rajoy, quedaría roto un tabú sobre sus malas relaciones, para empezar a deberse favores. Y es lo que temen los nacionalistas canarios, tras 23 años en el poder, desde que el 1 de abril de 1993 Manuel Hermoso censuró al socialista Jerónimo Saavedra.
De la ‘cuestión canaria’ al pacto en toda regla: dos semanas en vilo
Desde que el pasado día 6 DIARIO DE AVISOS publicó en primera página, con las fotos de Rajoy y Susana Díaz, el titular La cuestión canaria, en el diálogo nacional PP-PSOE hasta que este miércoles el presidente Clavijo admitió su inquietud por el posible traslado de Madrid a Canarias de los acuerdos de dichos partidos para la investidura, diríase que la clase política local -y los dirigentes nacionalistas en particular- han pasado de la incredulidad a una preocupación razonable.
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